
Un operativo de rutina en un control vial sobre la Ruta Nacional Nº 9, en Tucumán, derivó en la detención de una mujer de nacionalidad boliviana que intentaba traficar cocaína bajo la modalidad conocida como “capsulero”.
El procedimiento fue realizado el martes por efectivos del Escuadrón 55 “Tucumán” de la Gendarmería Nacional, en el Peaje “Molle Yaco”, ubicado en el kilómetro 1.358, a la altura del Puesto de Control Fijo Trancas, según informó el portal del diario La Gaceta.
La inspección tuvo lugar en un ómnibus de larga distancia, detenido en medio del operativo de seguridad vial. Durante el chequeo de los pasajeros y sus pertenencias, los gendarmes advirtieron una situación sospechosa: una mujer llevaba, en su bolso de mano, 12 cápsulas que contenían una sustancia blanca.
Tras ser interrogada, ella admitió que, además, había ingerido una cantidad considerable de cápsulas similares, lo que encendió las alertas de los agentes no solo por el delito, sino también por el riesgo vital que implicaba para la detenida.
La declaración de la implicada llevó a la rápida intervención judicial. El Juzgado Federal N° 2 de Tucumán dispuso el inmediato traslado de la mujer al Centro de Salud más cercano, ante el peligro de una posible intoxicación masiva o ruptura de las cápsulas en su organismo. Una radiografía realizada en el hospital confirmó que la paciente tenía decenas de envoltorios en el abdomen.
Bajo seguimiento médico continuo, logró evacuar un total de 106 cápsulas adicionales, que se sumaron a las doce incautadas en el bolso. En total, el procedimiento permitió secuestrar 118 de estos elementos que, sometidas a pruebas de campo (Narcotest), dieron positivo para cocaína. El peso final de la sustancia secuestrada alcanzó 1 kilo 388 gramos, cifra que confirma la gravedad y escala del intento de contrabando.