Un impactante hallazgo sacudió al puerto de San Lorenzo, en la provincia de Santa Fe. En un operativo conjunto entre la Dirección General de Aduanas y la Prefectura Naval Argentina, se incautaron más de 400 kilos de cocaína que estaban ocultos en una heladera del buque, mezclados con la comida de la tripulación.
La embarcación, que portaba bandera de las Islas Marshall, había iniciado su recorrido en Dubái, hizo una escala en el Pontón Recalada, un buque estacionario ubicado en aguas internacionales del Río de la Plata, y tenía como destino final Países Bajos, tras una próxima escala en Uruguay.
Según fuentes judiciales, el cargamento incautado tiene un valor estimado de 6 millones de dólares y fue descubierto gracias a tareas de inteligencia y control de rutina que llevaron a los agentes a realizar una revisión minuciosa del buque.
Los bolsos que contenían la cocaína estaban escondidos en una heladera del sector de alimentos del personal, un método poco habitual que alertó a los agentes por el peso y el volumen inusuales. La intervención fue coordinada por la Unidad Fiscal Federal Regional de San Lorenzo, que ahora investiga si se trata de un caso aislado o parte de una red de narcotráfico internacional.
El hallazgo se suma a una serie de operativos recientes que demuestran el rol estratégico de los puertos argentinos en las rutas del narcotráfico global. Las autoridades trabajan para determinar en qué punto del recorrido la droga fue cargada y si hubo participación de miembros de la tripulación.
