
Aveces no alcanza solo con los apellidos o la jerarquía individual de los buenos jugadores,también se necesita un guiño del destino. Básicamente, tener la suerte de tu lado... No es que Rosario Central no haya merecido la victoria, porque incluso en buena parte del partido fue superior a Vélez y hasta tuvo una gran cantidad de chances claritas, pero en el momento que parecía que el empate no le caía tan mal, encontró el triunfo.
En el arranque del partido le costó al equipo de Ariel Holan, de hecho el Fortín en los primeros minutos tuvo mayor protagonismo. Sin embargo, eso cambió rápido, principalmente porque Ángel Di María empezó a encontrar espacios y entonces jugó e hizo jugar.
En poco más de un cuarto de hora, el Canalla armó un jugadón que se inició en los pies de Fideo y derivó en un centro cinco estrellas de Sández para que Véliz gane en las alturas y le dedique el tanto a Miguelo, tan canalla como fortinero...
Pero claro que eso no fue todo. Central acumuló varias llegadas ante un Vélez que no parecía tener reacción. Incluso, el complemento, arrancó con un buen remate de Nacho Malcorra que pegó en el palo y parecía que sería todo para la visita, pero...
Vélez reaccionó, primero con un tiro en el palo de Galván y después con la magia de Manu Lanzini, quien apenitas pasados los cinco minutos de la segunda mitad ejecutó con maestría un tiro libre y puso el empate. A partir de ahí, todo empezó a ser del local, que mostró puntos altos y generó buenas chances.
Rosario Central, que fue empezando a sentir el cansacio y hasta perdiendo a algunas piezas clave o teniendo a otras en la cancha pero entre algodones, empezó a mirar con buenos ojos la parda y parecía que solo esperaba el final del partido...
Pero fue justo en ese momento en que llegó lo inesperado: Elías Gómez saltó a disputar una pelota con el brazo muy arriba, Merlos fue a ver la situación al VAR y cobró penal, que Malcorra cambió por gol para darle otro triunfo importante al Canalla y aportar más argumentos para tenerlo como uno de los candidatos.