
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo este domingo que está decidido a poner en marcha el plan recientemente aprobado para ocupar la Ciudad de Gaza, el cual fue condenado a nivel internacional.
Además, aseguró que Israel mantendrá el control de la seguridad en el enclave después de la guerra, aunque permitirá a un órgano no israelí gestionar la vida cotidiana en el lugar.