
La preocupación y la angustia rodean al entorno de Alejandra “Locomotora” Oliveras, quien continúa internada en terapia intensiva en el Hospital José María Cullen de Santa Fe tras haber sufrido un ACV el pasado lunes. En las últimas horas, su hermano Jesús brindó detalles sobre su estado de salud y el impacto que generó el episodio en su familia.
“Estamos shockeados. Nunca imaginamos algo así en alguien tan sana como mi hermana. Es la persona más saludable que conozco”, expresó en una entrevista televisiva. Según relató, el ACV ocurrió mientras dormía. Su sobrino intentó despertarla y la encontró confusa y sin poder mover la mitad del cuerpo. La ambulancia llegó rápidamente y fue trasladada de inmediato al hospital.
Jesús recordó que pudo hablar con ella al día siguiente del episodio: “Estaba consciente, me reconoció y me preguntaba si yo había comido. Seguía pensando en nosotros. Eso me tranquilizó”. Sin embargo, con el correr de las horas su estado se complicó y los médicos decidieron operarla de urgencia por una inflamación severa y un edema cerebral. “Le sacaron una parte del cráneo para liberar presión. Ahora está estable, pero con asistencia mecánica. El pronóstico es hora a hora, y habrá que esperar diez días para evaluar su evolución”, explicó.
En cuanto al procedimiento, su hermano aclaró que fue inducida a un coma farmacológico, una práctica habitual luego de una operación de esa magnitud. También reveló que no sabían que ella era hipertensa, a pesar de haber trabajado juntos durante su carrera como boxeadora.
Con profunda emoción, Jesús habló también de la infancia compartida y del espíritu inquebrantable de su hermana: “Ella era más fuerte que todos, hasta que los varones de su edad. Siempre fue mi heroína. Empezó a boxear para defenderse y salir de la miseria. Nunca la vi deprimida, ni siquiera cuando las cosas estaban mal. Siempre optimista y luchadora”.
Sobre el futuro, fue claro: “Conociéndola, va a reaccionar. Es muy fuerte. Tenemos de vuelta a Locomotora”.