
La reciente Resolución 460/2025 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), que flexibilizó la histórica barrera sanitaria al sur del río Colorado, generó una fuerte reacción entre las entidades rurales patagónicas. La norma derivó en la suspensión de exportaciones de carne a Chile, uno de los principales mercados externos de la región.
Ante el reclamo sostenido de los productores, el Gobierno nacional convocó a las federaciones rurales de las cinco provincias patagónicas a una reunión que se realizará el próximo martes en la sede de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca en Buenos Aires.
Entre los representantes que asistirán al encuentro estará el presidente de la Sociedad Rural de Río Gallegos, Enrique Jamieson, quien confirmó su participación y fue categórico: “Vamos a dar pelea y apelamos a que se revise la decisión. Esta resolución pone en jaque años de trabajo y de defensa del estatus sanitario patagónico”.
La medida del SENASA permitió el ingreso de carne con hueso a la región, lo que fue leído por algunos sectores como una oportunidad de abaratamiento de precios en provincias como Neuquén. Sin embargo, el impacto negativo no tardó en llegar: el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile notificó oficialmente la suspensión temporal de las compras de carne patagónica, argumentando riesgos sanitarios que afectan la condición de región libre de aftosa sin vacunación.
Desde el Bloque Rural Patagónico, que integra la Sociedad Rural de Río Gallegos junto a otras entidades de la región, emitieron un duro comunicado bajo el título “A la Patagonia le mintieron y la dejaron sin estatus sanitario”. Allí denuncian que, durante las reuniones previas a la publicación de la norma, el Gobierno nacional se había comprometido a no avanzar sin el aval expreso de los países compradores, como Chile y los miembros de la Unión Europea. Sin embargo, las respuestas oficiales fueron negadas a las entidades rurales y conocidas recién después de la entrada en vigencia de la resolución.
En ese sentido, Jamieson remarcó que “la falta de transparencia y consulta con los productores patagónicos demuestra un profundo desconocimiento de lo que significa para nuestra región haber alcanzado un estatus sanitario diferenciado, que hoy está siendo puesto en riesgo sin garantías ni respaldo”.
La preocupación también se extiende a Europa. Desde la Sociedad Rural de Neuquén advirtieron que la Unión Europea iniciará nuevas auditorías y fiscalizaciones para “reanalizar la situación sanitaria” de la Patagonia, lo que podría impactar aún más en las exportaciones.
En este contexto, el encuentro del martes en Buenos Aires se vuelve clave para el futuro del sector ganadero patagónico. Desde la Sociedad Rural de Río Gallegos, insisten en la necesidad urgente de que el Gobierno nacional derogue la resolución y restituya las condiciones sanitarias que por años permitieron el desarrollo de un mercado de exportación diferenciado y competitivo.