Tiene 34 años y está internada en Viedma. Están evaluando su alta, para que inicie su recuperación en su lugar de origen.
Una joven de 34 años se recupera en Viedma tras sufrir un Accidente Cerebro Vascular (ACV) en las playas de Las grutas el 30 de diciembre, en la víspera de la despedida del 2024.
El episodio ocurrió en la primera bajada, cuando la chica estaba a punto de meterse en el mar. La rápida intervención de los guardavidas fue clave, porque posibilitó el inmediato traslado al hospital Violeta Villalobos del balneario. Desde allí fue derivada al Zatti, ubicado en la capital rionegrina.
"Cuando se dan esos episodios la persona empieza a perder la consciencia, y puede desmayarse o realizar movimientos involuntarios, perder coordinación. Ése fue el caso de esta mujer, que estaba con un grupo de amigos. Se desplomó antes de meterse en el mar. Como arrancó además con dificultades en el habla nos dimos cuenta de que era un ACV, y dimos aviso enseguida al hospital, que envió una ambulancia" contó Mauro Scalessa, el coordinador de los guardavidas, en diálogo con Mejor Informado.
Al llegar al nosocomio articularon el traslado al Zatti, que es de mayor complejidad. Allí permaneció, primero, en terapia intensiva, y luego se la derivó a sala común.
"No es tan usual que un ACV se dé en personas tan jóvenes, pero obviamente en ocasiones pasa. Puede darse porque la persona tenga (y lo desconozca) una malformación arterio-venosa, o por antecedentes familiares que, ante niveles de colesterol altos, la predispongan a estos riesgos" le detalló a este medio Pablo Duna, el director del centro asistencial del balneario.
¿Qué es un ACV y por qué ocurre?
"Lo que ocurre en estas situaciones es que se ve afectada una parte del cerebro. Según la porción dañada se dan los síntomas. Puede que la persona tenga dificultades para hablar (como si estuviese alcoholizada), también experimentar una parálisis facial y de un brazo y una pierna, generalmente de partes distintas del cuerpo (pierna derecha y brazo izquierdo, o al revés)" informó el médico.
"Lo único efectivo es poner a la persona de costado (por si vomita y se atraganta) y llamar rápido a urgencias. La intervención médica inmediata evita secuelas graves" explicó.
Según trascendió la joven de 34 años había viajado con un grupo de amigos, para pasar las Fiestas en Las Grutas y disfrutar de la playa.
Se descompensó el 30 de diciembre a las 17'. Desde ese día se encuentra hospitalizada en el hospital Zatti de Viedma, al que fue derivada.
¿Cómo está ahora?
"La buena noticia es que la mujer ya no está en terapia intensiva, pero le quedaron secuelas que requerirán rehabilitación", informó Duna.
"Tiene una parálisis facial, también de su pierna izquierda y de su brazo derecho, y dificultad en el habla. Pero todo puede mejorar rehabilitándose, con las terapias adecuadas", apuntó.
"Lo que sabíamos es que estaba a punto de obtener el alta para iniciar esas terapias en Neuquén, de donde es oriunda", cerró el director.