En la tarde de hoy, asumió la presidencia en Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva quien en un contexto de acompañamiento de jefes de estado recibió la banda presidencial. Tuvo además una amplia convocatoria popular.
Para referirse a tal situación de trascendencia mundial la gobernadora de la provincia de Santa Cruz dijo que su presidencia es: "Un soplo de esperanza para nuestra Patria Grande. Deseamos lo mejor al pueblo hermano de Brasil y a @lulaoficial . Retomamos sus palabras "dictaduras nunca más, democracia siempre" para recorrer sin miedo el camino de la democracia real junto a ustedes".
El mensaje lo emitió a través de sus redes sociales.
El desafío de Lula
El presidente Lula Da Silva tendrá desafíos inmediatos mayores a los que enfrentó en sus otras dos presidencias, que dejó con una envidiable popularidad del 87%.
"En los primeros 100 días deberá demostrar qué rumbo tomará el gobierno. La victoria electoral fue apretada y enfrentará un país dividido con una oposición aguerrida. Necesita liderar un gobierno de pacificación y unión nacional", explicó Leandro Consentino, politólogo del instituto Insper de Sao Paulo.
Lula se impuso a Bolsonaro en el balotaje del 30 de octubre por 50,9% de los votos frente a 49,1%, un resultado que dio cuenta de una sociedad profundamente polarizada.
Además, el exsindicalista deberá conquistar "credibilidad" sobre el manejo de las cuentas públicas ante una situación fiscal delicada, pese a que sus promesas de campaña requieren un aumento del gasto para financiar programas sociales, según Consentino.
Unos 30 millones de los 215 millones de brasileños pasan hambre y la economía a duras penas logra recuperarse tras el golpe de la pandemia. (Con información de Ámbito Financiero)
