A las 02:00 horas de la madrugada de hoy se inició un motín en la población que se encuentra alojada en el Anexo 5 que posee Penitenciaria, al lado de la División Comisaría Quinta de la ciudad de Río Gallegos, capital de la provincia de Santa Cruz.
Ante esta situación muchos móviles policiales fueron requeridos para llevar a cabo una especie de cerrojo custodiando la manzana, dado que en principio no se sabía el motivo de la protesta que se había generado en el interior, haciendo entrever que existirían problemas entre los detenidos.
En la oportunidad Santa Cruz en el Mundo pudo establecer contacto con el Inspector General Víctor Ramos, Director del Servicio Penitenciario de Santa Cruz, quien debió hacerse presente en el lugar y encabezar la negociación para establecer el orden de los reclusos.
Ramos manifestó que ingresó al sector donde dialogó con la población, “me solicitaron que sacara a tres internos porque no saben convivir con el resto, dijeron además que no quisieron entrar en la convivencia, es decir, no saben comportarse ni se supieron adaptar al sistema. Allí, les explique que necesitaba unos minutos para contestarles mientras se diagramaron todos los traslados”.
A su vez “esperé a que llegara el Grupo Especial de Traslado de Penitenciaria, quienes una vez en el lugar debieron equiparse adecuadamente porque ingresaron provistos de escudos y protecciones. Luego entraron para después sacar a los tres detenidos y llevarlos a un nuevo destino. También estaba la División Canes, quienes formaron parte de la maniobra”.
El Director confirmó a éste portal, que “los reclusos que fueron sacados del Anexo 5 fueron los hermanos Maillo y otro de apellido Albornoz”.
“Con este cambio en la población se restan tres, de los 18 que había, en consecuencia otros tres reclusos serán trasladados desde la Alcaidía hacia el Anexo 5, ya que estamos muy justos, casi sin espacio”, subrayó.
Para finalizar, el Inspector Ramos agradeció la solidaridad de los policías que acudieron al primer llamado ante un hecho de ésta magnitud, para el cual se deben tomar todos los recaudos necesarios, salvaguardando la vida de los reclusos y del personal de seguridad.
