Un individuo oriundo de la provincia de Formosa, pero que desde un tiempo a esta parte, vive en Río Gallegos, capital de la provincia de Santa Cruz, llegó a un acuerdo con la Justicia por una causa de tenencia de estupefacientes: solo deberá pagar una multa de 3500 pesos y realizar trabajo comunitario en una ONG.
Se trata de un caso que se registró en agosto del año pasado en el populoso Bº Gaucho Rivero cuando J.L.M. junto a otros sujetos fueron sorprendidos por la policía cuando circulaban a bordo de un Chevrolet Astra, en actitud sospechosa.
Allí, tras ver a la policía que realizaba controles preventivos en la zona, el acompañante del rodado alcanzó a escapar y se escondió en una vivienda mientras J.L.M., que conducía el Astra, se resistió al arresto y llegó a golpear a los agentes.
En una requisa vehicular posterior, los efectivos encontraron dentro del habitáculo unos 22 envoltorios de cocaína y una libreta en la que habría anotaciones sobre las transacciones que el sujeto había realizado con la droga.
Si bien se desconoce como el expediente cambió de caratula desde “tenencia con presuntos fines de comercialización” a “tenencia simple”, en la mañana de ayer, se realizó una audiencia en las instalaciones del tribunal y el acusado ofreció pagar una multa y realizar 200 horas de trabajo comunitario en la ONG “Quiero un Río Gallegos limpio”. Finalmente, con el visto bueno de la Fiscalía, el tribunal encabezado por Gabriel Reynaldi dio lugar a lo solicitado. De igual manera, el sujeto deberá establecer domicilio durante un año.
