Así lo decidió la Cámara Criminal de la Primera Circunscripción Judicial de Río Gallegos presidido por la jueza Mónica Vila acompañada hoy por el vocal Joaquín Alejandro Cabral.
Entonces el cabo de Policía, Pablo Núñez, (ausente en la sala) fue hallado .culpable de asesinar a su ex pareja, la docente Jésica Minaglia. El hecho sucedió el 14 de abril del 2020 en la localidad de Piedra Buena. El caso marcó la adhesión de Santa Cruz a un protocolo de investigación que cambió la perspectiva para esclarecer crímenes violentos de mujeres.
Durante el proceso estuvieron en la sala los familiares de la docente, en tanto fuera del recinto estaban amigos y colegas, como también organizaciones feministas.
Vale mencionar que en representación del Ministerio Publico Fiscal estuvo José Chan, en tanto que como abogados de la querella (la madre y el hermano de Jésica) están los abogados Enrique Papa y Raquel Coronel
Juicio
El proceso judicial comenzó el lunes 8 de mayo, oportunidad que el acusado, que tieniendo como abogados a Mauricio Mariani y Santiago Pinto, se negó a declarar. Luego el día miércoles10 se realizarán los alegatos.
El Tribunal escuchó más de veinte testimonios, en su mayoría, amistades de la docente fallecida, algunas de ellas por videollamada. Sin embargo, resultaron claves los relatos de la madre de Jésica y de quien semanas antes del crimen, había comenzado un vínculo amoroso con la víctima. En todos los casos, los testigos coincidieron en que la docente de treinta años estaba animada por haberse separado de Núñez, pero que este no aceptaba su decisión.
La semana pasada se cumplieron tres años desde que el ex policía fue procesado con prisión preventiva, por el “femicidio doblemente agravado por el vínculo y alevosía”. En ese mismo instrumento, la jueza de Instrucción, Noelia Ursino, solicitó la aplicación de la reparación económica conocida como Ley Brisa, para la hija que la pareja tuvo en común, y que al momento del crimen tenía dos años.
El crimen ocurrió el 14 de abril del 2020 y desde entonces, la comunidad de Piedra Buena, los movimientos de mujeres y de la docencia, reclamaron justicia por Jésica. La localidad luce murales con su cara y su femicidio marca un punto de inflexión en torno a la violencia por razones de género.
En Santa Cruz, y por decisión del Tribunal Superior de Justicia, a partir de una Acordada que se firmó ese mismo año, existe la obligatoriedad de aplicar el “Protocolo para la Investigación y Litigio de Casos de Muertes Violentas de Mujeres” presentado por la unidad especializada del Ministerio Público Fiscal de la Nación, con elementos prácticos y pautas de actuación con perspectiva de género.
Según el expediente, Pablo Nuñez ingresó la tarde noche del 14 de abril del 2020, en plena cuarentena, a la vivienda de Jésica Minaglia, con quien había tenido una relación de pareja y convivencia durante una década. Allí le causó heridas mortales con varios golpes en la cabeza, hasta que su deceso se produjo, se cree, ya en horas de la madrugada. En el momento del crimen, el hijo de ambos no estaba en la casa. La docente no presentaba signos de defensa. El cuerpo fue encontrado por su madre, que hoy se volvió a ver cara a cara con Núñez.
