Se trata de Estefanía Rosales, una chica de Río Gallegos que tomó la drástica decisión de quitarse la vida esta jornada en el interior de su departamento ubicado en la zona céntrica de nuestra ciudad capital.
La joven fue encontrada sin vida en el interior del departamento que, hace unos años alquilaba en la esquina de Comodoro Rivadavia y Alcorta de nuestra ciudad capital, a unos metros de la casa de Gobierno.
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Si bien las circunstancias o el método que la chica utilizó para suicidarse no están del todo claras. Su cuerpo fue trasladado a la Morgue Judicial para que le realicen la autopsia correspondiente, para determinar fehacientemente, las causas de su deceso. De igual manera, desde la policía indicaron a Santa Cruz en el Mundo que no presentaba lesiones visibles y que, antes de ser encontrada sin vida, estaba sola en su departamento, por lo que se trataría de un suicidio.
Reconstruyendo las últimas horas de vida de Estefanía, se supo que en la madrugada había ido a trabajar en un conocido local nocturno de Río Gallegos, lugar donde se desempeñaba como barista e incluso compartió historias a traveés de las redes sociales.
Una de las historias, quizás las más escalofriantes, fue una que realizó cerca de las 6 de la mañana en la que solo puso una frase: “es mejor irme que quedarme”.
Hace un tiempo, ella utilizó las redes sociales en la que explicaba que había radicado una denuncia pública por una violación de la que había sido víctima: “Yo desperté con un hombre encima mío desnudo penetrando sin mi consentimiento (disculpenme si soy cruda), le dije más de una vez que "no, que pare" pero el nunca me quiso escuchar y siguió hasta que logre sacarlo de encima de mí” indicó en su momento.
“No saben cuanto deseo que el abuso y el 'poder' sobre una persona a otra se termine, no saben cuanto anhelo que se termine la injusticia y quienes dañaron sean castigado como debe ser y que no queden libres e impunes como hoy en día me paso y me va a seguir pasando... Porque esta es la 'justicia de Argentina' y una como mujer solo debe callar y hacer su propio descargo, y no me da miedo ser apuntada pero la puta madre ustedes que apuntan no saben cuanto pesa esto y cuántas veces te dan ganas de acabar con tu propia vida para que el recuerdo no invada más tu cabeza” concluyó.