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Policial

Dos mujeres policías "del 101" que cumplieron con su deber, servir a la comunidad

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Daniela Flores, agente y Sandra Aguilar, sargento escribiente son las dos operadoras del 101 Comando Radioeléctrico Río Gallegos que tuvieron el fin de semana pasado una intervención sumamente positiva porque le salvaron la vida a una mujer.

El 101 es la línea de emergencia que poseen los ciudadanos, que existe en la provincia de Santa Cruz y a través de la cual la policía toma conocimiento de los hechos en proceso y son quienes acuden llegan primero a los acontecimientos para después delegarlos a las respectivas comisarías que por jurisdicción corresponda.

Daniela de 23 años y Sandra de 46 años, se encontraban de servicio el domingo por la tarde y fueron quienes con profesionalismo y siguiendo un protocolo de actuación contuvieron el caso y lograron que todo tuviera un final deseado.

Santa Cruz en el Mundo no va a ahondar en el hecho, por cuestiones lógicas de sensibilidad y de integridad del suceso. Sin embargo, la labor y acción que ejecutaron ambas mujeres tiene una connotación que debe ser reconocida y por eso decidimos hablar con ellas quienes contaron de qué trata su tarea.

Ambas son madres, y eligieron esta profesión como un modo de vida, su sustento familiar, pero a la vez reconocen que la línea telefónica es el origen del accionar policial y ellas como sus compañeros, están capacitadas para brindar el servicio a la comunidad.

Con un suspiro profundo por los nervios de un micrófono periodístico cuentan su experiencia. ?Yo hace poco que estoy en el Comando, apenas 6 meses pero me siento muy contenta y cada vez que el teléfono suena, sé que alguien está detrás de la llamada con algún tipo de necesidad?, relató Flores. Por su parte, Aguilar lleva 4 meses, previamente ha desarrollado tareas en comisarías adquiriendo otro tipo de experiencias donde el contacto es más concreto.

?Obvio que somos sensibles pero acá detrás del teléfono tenemos la fortaleza intacta, aparte somos un grupo de compañeros que nos vamos acompañando. Nosotros al atender las llamadas del 101 entablamos comunicaciones muy impactantes, serias y decirte que son segundos, minutos a veces interminables o a veces efímeros donde vos debes actuar precisa y sin dudar, no hay tiempo para cuestionamientos?, subrayaron.

Hay mucha adrenalina, mucho nervio e incluso impotencia. ?Hay situaciones que deseas traspasar la línea para estar cerca de la gente, del que necesita ayuda. Sabes que sos vos la protección que están buscando, seguimos los pasos, pero son nuestros compañeros quienes llegan primero y personalmente ellos asisten a la persona?, contaron y agregaron ?te quedan ganas de saber más por eso sólo cuando podemos nos interiorizamos para saber cómo terminó la actuación, creo que recién ahí, según el caso, dimensionas sobre el hecho en sí, del cual fuiste parte?.

Son llamadas de violencia de género, por ilícitos - robos, choques, intentos de suicidio, incendios, secuestros, chicos que informan por amenazas de bomba.

?Hay casos de vida o muerte, muchas historias nos van marcando en el desarrollo de la labor, y sabemos que son todos casos de la vida real?.

?Te encontras con gente que la está pasando mal, y con esa desesperación se olvida de todo, del nombre, de dónde vive, que era lo que iba a contar, y nosotros debemos guiarlos porque necesitamos que se calme, para que relate claramente los hechos, para así, poder llegar al lugar de la urgencia. La calma es nuestra mejor aliada y debemos saber transmitirla?.

También en otro orden de cosas las operadoras comentaron que el 101 es un número ya naturalizado por toda la comunidad, además porque están las 24 hs., los 365 del año, y por lo tanto reciben consultas de todo tipo. ?Nos llaman por direcciones de comercios, por el número de la perrera, las farmacias de turno, ubicación de ciertas calles, del clima, por quejas de facturas de teléfonos, somos un servicio a pleno. Incluso recibimos llamados de gente muy mayor que a veces sólo quiere hablar y, en la medida de nuestras posibilidades, se dialoga o también chicos que se comunican porque desean charlar y también estamos?.

En el final del diálogo, les consultamos sobre cómo se trabaja en la dependencia con los jefes directos y coincidieron que ?ellos nos acompañan diariamente, son accesibles y hacen las consultas sobre el procedimiento rutinario. El trabajo policial se destaca por sus jerarquías, se respetan las responsabilidades de cada uno, pero eso no quita que cada opinión se tenga en cuenta y dentro de un ámbito como éste es fundamental?.

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