Un hombre fue acusado por el intento de femicidio de su pareja luego de gatillarle tres veces a la mujer tras los festejos de Navidad en la vivienda que compartían, en Cutral Co. La víctima se salvó por una falla del arma, logró escapar y pedir auxilio a un vecino y sus familiares, quienes motivaron la intervención de la Policía.

El violento episodio, del cual la mujer se salvó de milagro, ocurrió en las primeras horas del pasado viernes 25, aunque trascendió apenas esta semana. Según relató la fiscal Marisa Czajka en la audiencia posterior al hecho, todo inició minutos antes de las 8, cuando la pareja volvió al domicilio que compartían, sobre calle Avenida del Trabajo al 1400, tras los festejos familiares.

En esas circunstancias, y según indicó la víctima a la Policía, "por celos", el hombre comenzó a agredirla verbalmente, situación que rápidamente se tornó física. El agresor entonces "tomó un arma, agarró del cuello a la víctima -quien se encontraba en la cocina- la apoyó contra la pared y, con clara intención de darle muerte, le disparó en al menos tres oportunidades, no logrando consumar su designio por razones ajenas a su voluntad, ya que las balas no salieron".
Afortunadamente, la joven de 28 años, logró escapar al exterior de la vivienda para pedir ayuda a un vecino y a su madre, quienes convocaron a la Policía. Los familiares de la mujer arribaron primero, y fue su cuñado quien primero lo separó de la mujer y comenzó a golpearlo.
En simultáneo, arribaron los efectivos, quienes vieron al agresor intentar deshacerse del arma de fuego en su mano, y lo detuvieron en el acto, según relató el comisario Claudio Vinet. También se secuestró el arma, un revólver calibre 22 mm.

Con la evidencia recabada de las primeras horas, la fiscal del caso solicitó en una audiencia realizada el día sábado, que el violento sea acusado por el delito de homicidio triplemente calificado por el vínculo, por mediar violencia de género y por el empleo de arma de fuego, en grado de tentativa.
También requirió la imposición de una prisión preventiva de dos meses, frente a un posible riesgo de entorpecimiento y para resguardar la integridad de la víctima y su familia ante el grave episodio.
La jueza de garantías interviniente hizo lugar al pedido de la parte acusadora y dictó la apertura de la investigación, de cuatro meses.