
El juicio en contra del exdiputado provincial Germán Kiczka y su hermano, Sebastián Kiczka, llegó a su recta final. Ambos se encuentran detenidos desde agosto del año pasado y están acusados por los delitos de tenencia y distribución de material de abuso sexual de menores, aunque Sebastián también fue imputado por abuso sexual.
Este miércoles, los jueces del Tribunal Penal N°1, Gustavo Bernie, Viviana Cukla y César Antonio Yaya, darán a conocer el veredicto en una audiencia que se llevará a cabo a partir de las 8:30, en el Salón de Usos Múltiples del Edificio de Tribunales, ubicado en la ciudad de Posadas.
La investigación sobre el apellido Kiczka empezó en Estados Unidos bajo la sospecha de formar parte de una red de pedofilia internacional. En la misma, se incluyó a Sebastián y a su padre, quienes fueron allanados en febrero del año pasado y se les inició una causa. Ambos aceptaron los cargos en un juicio abreviado.
A partir de esto, se empezó otra investigación por parte de la Unidad de Cibercrimen y la Secretaría de Delitos Complejos (SAIC) de la provincia de Misiones. Con las pruebas reunidas, el Juzgado de Instrucción penal N°4 de Apóstoles, a cargo del doctor Miguel Ángel Faría, dictó una nueva orden de allanamiento en la casa del diputado provincial.
Allí, las autoridades secuestraron dos celulares y una notebook, en donde se hallaron archivos con material pedófilo, zoofilia e incesto, además de revistas, juguetes sexuales y otros elementos comprometedores.
El juez Faría también ordenó el allanamiento del local Pizza Leo Club, propiedad de los hermanos Kiczka, donde encontraron 603 archivos multimedia con contenido de explotación sexual de menores.
Los hermanos Kiczka fueron detenidos en agosto de 2024, tras permanecer varios días prófugos, y fueron imputados por el delito de “tenencia y distribución de material de abuso sexual contra menores”. Sebastián, además, fue imputado por abuso sexual.
El juicio
El juicio comenzó el lunes 31 de marzo y solo algunas de las jornadas fueron públicas. Así lo solicitó el Tribunal Penal N°1 debido a la gravedad del caso y por protección a las víctimas, sobre todo porque algunos de los menores involucrados tienen menos de 13 años.
En las audiencias, que se llevaron a cabo en los días 1, 3, 4, 7, 8, 9, 10, 11, 14 y 15 de abril, se presentaron las pruebas en contra de los acusados y los testimonios de más de 60 testigos.
En el segundo día del proceso judicial, Germán Kiczka hizo su declaración y sostuvo su inocencia. A su vez, afirmó que la causa es una prueba de la “persecución política” por haberse opuesto a los proyectos que presentó el oficialismo en Misiones. Además, el exdiputado provincial admitió que sí buscó y descargó videos pornográficos, “pero no con menores de 13 años”.
Por su parte, Sebastián repitió la misma versión que en la indagatoria: que nunca tuvo “ninguna relación” con una adolescente y que tampoco se fugó. En su testimonio, también dijo que se hace cargo de la acusación de tenencia de material de explotación sexual de menores, y adjudicó la descarga de las fotos y los videos a que padece una “enfermedad o compulsión psicológica”.
El fiscal a cargo de la investigación, Martín Rau, dijo que este miércoles será una jornada decisiva luego de que se le exhibiera “material muy fuerte a los jueces” de “cosas que son espantosas de ver”.
En cuanto las penas que podrían recibir los hermanos Kiczka, Rau precisó: “Hay un montón de cuestiones que se trabajan durante el caso y uno tiene que determinar un número de archivos, un número específico de conductas penales, para poder hacer el cálculo de la escala penal que corresponde. Son penas que no van a ser leves. Estamos construyendo una pena que sea lo más justa y razonable a la luz de los hechos que nos tocó mostrarles al tribunal”.
El fiscal precisó que se encontró “material con bebés y niños con perros”, sin brindar más detalles, y que la dirección IP con la que se inició la investigación en Misiones “reveló que la persona que estaba detrás de uno de los ordenadores era un diputado que estaba en funciones”.