Hay un punto en el camino al Centro de Actividades de Montaña La Hoya, en Esquel, que es conocido como "la curva de los guanacos" aunque estos animales suelan mantener una distancia prudente de los seres humanos y sea difícil verlos de cerca. Sin embargo, la falta de turistas por la cuarentena permitió que reclamaran la ruta que lleva su nombre.


El episodio coincidió con la primera nevada del año en Esquel. Si la idea era registrar los rincones recién cubiertos de blanco en la montaña, los observadores se llevaron un premio extra con la aparición de un grupo de guanacos que decidió cruzarse en la foto -y en la ruta- a La Hoya.

Puede que los guanacos no sean tan centrales como otros camélidos durante la pandemia de Covid-19, pero como hay pocos visitantes en Esquel debido a que la cuarentena recién empieza a relajarse de manera controlada en el interior del país ellos decidieron robarsse el show de la primera nevada.
Los guanacos pesan hasta 100 kilos que se mueven en grupos pequeños liderados por un macho y usualmente compuestos por varias hembras y sus crías. Como tienen pelaje doble, estos animales corredores están bien adaptados a las inclemencias del viento y la nieve de la cordillera.

A diferencia de otros camélidos, como llamas o alpacas, los guanacos son considerados animales salvajes así que siempre van a mantener su distancia de los seres humanos, y más aún de los autos, que por suerte para ellos escacean por estos días.

Al día de la fecha Chubut registró apenas cuatro enfermos por Covid-19 y hay seis pacientes más en etapa de estudio, mientras que se descartaron 152 posibles casos. Con esas cifras la provincia está dentro de la zona del país que puede empezar a avanzar hacia la llamada "nueva normalidad", aunque todavía está por verse cómo impactará la cuarentena en la temporada turística de invierno.

Mientras tanto, y al margen de las cuentas y proyecciones de los seres humanos, los guanacos se organizaron para reclamar su territorio.