En la ciudad de Palpalá, en la provincia de Jujuy, la policía encerró en corralitos armados al aire libre a infractores de la cuarentena obligatoria decretada por el Gobierno nacional.

La medida, que tuvo trascendencia nacional, sorprendió a todos y la explicación oficial que se dio de parte de la policía de la zona fue que "se armaron los corralitos para no mezclar a los presos".

Algunos de esos corralitos se armaron en plazas, donde las personas que violaron la cuarentena (alrededor de 14, según se informó) fueron demoradas hasta la decisión que tomara la Justicia.
En la provincia de Jujuy el gobernador Gerardo Morales anunció que a los que violen la cuarentena tendrán que pagar multas que van desde los 40 mil a los 340 mil pesos.
Una vez enterados en la capital provincial, desde el Ministerio de Seguridad de Jujuy se ordenó no continuar con la modalidad de los corralitos.