La acción del botón antipánico justo a tiempo evitó que una mujer fuera asesinada por su ex pareja, quien había entrado a la fuerza a su vivienda en Neuquén capital, la cortó en los brazos y comenzó a ahorcarla. Fue un familiar de ella quien accionó el dispositivo de seguridad y los policías detuvieron al agresor, que al día siguiente fue acusado de intento de femicidio y quedó con prisión preventiva.

El violento hecho ocurrió la madrugada del viernes. Sin embargo, horas antes, la mujer ya había solicitado la presencia de la Policía porque su ex pareja había ido a tirarle piedras a su casa y la amenazó.

Así, una vez que los efectivos se retiraron del lugar y la noche estaba calma, alrededor de las 5:30, la pesadilla continuó. Esta vez, la mujer fue sorprendida por su ex pareja cuando cerraba el portón de su vivienda.
“El hombre ingresó por la parte delantera con un cuchillo y la atacó, produciéndole cortes en las manos. También la golpeó en el rostro, la tomó del cuello y comenzó a estrangularla”, relató la fiscal del caso, Carolina Mauri, durante la formulación de cargos.
Fue en ese momento que un familiar de la mujer, al observar la situación, activó el botón antipánico que el Juzgado de Familia le había dado a la víctima. Fue así que a los pocos minutos arribó un móvil policial y detuvo al hombre, evitando que la matara.
El sábado, la representante de la fiscalía de Violencia de Género y Doméstica acusó al hombre por los delitos de tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por haber sido cometido con violencia de género (femicidio), amenazas y resistencia a la autoridad.
Además, solicitaron que se le impongan seis meses de prisión preventiva por existir riesgo para la integridad de la víctima.
Finalmente, el juez de garantías que intervino en la audiencia avaló lo peticionado por la fiscalía, tanto los cargos como la medida cautelar, aunque la otorgó por cuatro meses. Además, fijó dos meses como plazo para culminar la investigación.