En horas de este miércoles a la tarde, el Cuerpo Médico Forense realizó la autopsia al cuerpo de la víctima en la morgue de la Ciudad Judicial y constató que la causa de muerte fue producto de una herida de arma de fuego en la cabeza. El disparo se produjo a corta distancia, por lo que no se descarta ni un crimen ni un suicidio.

Si bien el médico policial que había constatado la muerte del joven agresor en el interior de la vivienda del barrio Villa Ceferino indicó, tal como relató el comisario mayor Mauricio Pamich en comunicación con LU5, que tenía “una herida de fuego en la región frontal derecha con orificio de entrada y no de salida con apoyamiento circular en la herida, lo que podría tratarse de un suicidio”, la autopsia descartó el apoyamiento.

Fuentes judiciales informaron a LMNeuquén, finalizada la diligencia médica por los forenses, que el cuerpo no tenía apoyamiento del arma y que el disparo se produjo a corta distancia.
Con esta información, los investigadores no descartan ninguna hipótesis, ya que el disparo pudo provenir de un tercero o del propio agresor, quien al ver lo que había acontecido, tomó la determinación de suicidarse.
Además, indicaron que en el interior de la vivienda se secuestraron vainas de diversos calibres. Previamente la Policía había informado del secuestro de dos armas de fuego, siendo una de calibre 32 y otra calibre 38.

Asimismo, el subdirector de la Dirección Seguridad de la Policía, Pamich, detalló que de las diligencias realizadas pudieron obtener un registro de una cámara a unos 50 metros de la vivienda donde sucedió el hecho. "Una cámara tomó a esta persona, el hermano de la señora, que iba subiendo hacia el domicilio ese y que llevaba en la mano un revólver", detalló el comisario, lo que se condice con los dichos de la mujer apenas se acercó el personal policial, sobre que su hermano arribó cargando dos armas de fuego y con el secuestro de las dos armas en la escena.
Respecto al marido de la mujer, sobre quien se pensó que era la víctima fatal en primera instancia, el comisario detalló que sufrió un disparo de arma de fuego en el ojo derecho sin salida y que producto de ello, perdió ese órgano. El hombre está internado en el hospital regional en grave estado, confiaron fuentes judiciales a este diario.
Por otro lado, Pamich indicó que el cabo primero se salvó por "un centímetro". "Sabemos por los dichos de los efectivos que acudieron en primera instancia, que los disparos que salían de adentro de la casa tenían la intención de atentar contra el personal policial", sostuvo el comisario.
En este sentido, indicó que "si el disparo al policía herido hubiese sido un centímetro más hacia la derecha le impactaba de lleno en la cabeza". El proyectil le lastimó la oreja izquierda y se alojó detrás de la oreja entre el cuero cabelludo y el cráneo, por lo que los médico evalúan una intervención quirúrgica, pero por el sitio dónde quedó alojado, es una operación complicada. "Sabemos que está fuera de peligro, que por momentos está lúcido y que van a realizarle un examen más exhaustivo para evaluar una intervención quirúrgica", contó Pamich.
Incluso, aclaró que los primeros en arribar al lugar fueron dos móviles con cuatro policías. Cuando uno de ellos resultó herido, su compañero lo cubrió y los otros dos le dieron cobertura a la mujer y sus hijos pequeños. "Ningún efectivo policial nos cuenta que ellos hayan disparado y tampoco tampoco se recolectó ninguna vaina calibre 9 milímetros que podría haber sido de un arma reglamentaria de la Policía", destacó el subdirector de la Dirección de Seguridad de la Policía.