Se trata de Ramona Elvira Ávalos (43), alias "La Gringa", que es la esposa de un hombre detenido en ese mismo penal que, se cree, comanda desde la cárcel los negocios ilegales en los alrededores de la prisión.

La mujer fue apresada esta madrugada por las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la policía provincial en la localidad santafesina de Capitán Bermúdez, indicaron las fuentes.

En una vivienda ubicada en Buenos Aires al 600 de esa ciudad, a 20 kilómetros al norte de Rosario, también fue arrestado un hombre identificado como Claudio Alves (29), el presunto autor de los disparos contra la Unidad Penal 11 de Piñero.

El tiroteo ocurrió el domingo pasado cuando una persona se bajó de un auto y disparó contra la hilera de familiares de presos que aguardaba para ingresar a la cárcel el día de visitas.

Según fuentes de la investigación, dos personas sufrieron heridas leves por el ataque que habría sido organizado por un grupo que trabaja bajo las órdenes de "La Gringa", que vende los números para el ingreso al penal y facilitaría otros beneficios a los familiares de los internos.

Voceros del caso sindicaron a la mujer como quien maneja ese y otros negocios ilícitos de una banda liderada desde la misma cárcel por René Ungaro (33), condenado a 11 años de prisión por el asesinato en 2010 del jefe de la barrabrava de Newell´s Old Boys, Roberto "Pimpi" Caminos.

"El Brujo" Ungaro está imputado también como jefe de una asociación ilícita que dirigía desde la prisión y que cometía delitos como usurpaciones y venta de drogas al menudeo a través de la familia Funes, enfrentada a tiros con los Caminos en barrio Tablada.

"La Gringa" supuesta "gerenta" extramuros de Ungaro- estaba prófuga desde la semana pasada cuando la policía allanó su vivienda del barrio Tablada, en el sur de Rosario.

Si bien la mujer no fue detenida, siete personas quedaron arrestadas en esos procedimientos en los que se secuestraron armas y estupefacientes, informó el Ministerio de Seguridad de Santa Fe.

Según la cartera, la mujer fue detenida esta madrugada "a raíz de una investigación que data de tiempo atrás y que además involucraba el ataque que se registró el pasado fin de semana en inmediaciones de la Unidad Penitenciaria n° 11".

Los investigadores creen que Ávalos era la encargada de gerenciar el negocio de los turnos para acceder a la cárcel de Piñero, justamente donde cumple condena Ungaro.

A través de escuchas telefónicas, los pesquisas detectaron que una organización les cobraba a los familiares de los presos para conseguirles un ingreso rápido y, a la vez, poder acceder con objetos para su familiares.

La recaudación de cada fin de semana ascendería a unos 30 mil pesos, según la investigación.

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