
Casi ocho meses después de iniciado el escándalo, el fiscal federal Eduardo Taiano ordenó analizar el contenido de los teléfonos secuestrados durante la investigación para determinar si el presidente Javier Milei intercambió mensajes con Hayden Davis, Mauricio Novelli, Manuel Terrones Godoy y otros impulsores de la “memecoin” $LIBRA, antes, durante y después del lanzamiento que desató un escándalo.
El requerimiento del fiscal Taiano también alcanza a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y al entonces asesor de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Sergio Morales, y abarca tanto los mensajes que hayan intercambiado, como las imágenes que puedan haber registrado durante el período bajo la lupa.
El pedido de análisis forense se centró en los dispositivos electrónicos incautados el 6 de marzo de 2025, cuyo contenido ya fue “extraído” y está en poder de los investigadores. A Mauricio Novelli se le secuestró un teléfono iPhone 16 Pro Max, un teléfono Motorola E6 Play y una CPU tipo gamer, mientras que a Sergio Daniel Morales le incautaron un teléfono Samsung Z Flip 3, una MacBook Air modelo A1370 y un pendrive marca Sony de 32 GB.
Taiano solicitó el análisis a la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal para determinar qué contienen los dispositivos sobre el proyecto $LIBRA. Así, la fiscalía pidió rastrear todas las conversaciones, sean individuales o grupales, que Mauricio Novelli y Sergio Morales mantuvieron con múltiples personas bajo la lupa.
Entre los contactos cruciales que se buscan en las comunicaciones de Novelli y Morales se encuentran los hermanos Milei, además de Davis y Manuel Terrones Godoy. La lista de personas investigadas en la comunicación incluye también a Sebastián Serrano, el CEO de Cardano, Charles Hoskinson, el CEO de Kip Protocol, Julian Peh (o Peh Chyi Haur), y el CEO de Cube Exchange, Bartosz Lipinski, entre otros.
Las comunicaciones, según dispuso Taiano, deben ser rastreadas en la totalidad de las aplicaciones de mensajería utilizadas, incluyendo WhatsApp, Telegram, Facebook, Instagram, X (Twitter) y LinkedIn, además de los mensajes de texto tradicionales. Para reforzar la conexión con figuras clave, el requerimiento incluye la búsqueda de llamadas y mensajes con múltiples líneas telefónicas cuyas titularidades están informadas a nombre de Javier Milei (trece números) y Karina Milei (un número).
La investigación no solo se enfoca en las personas, sino también en los temas y la terminología. Por eso también ordenó rastrear conversaciones o referencias vinculadas al evento Tech Forum, a la creación o lanzamiento de $LIBRA, y documentos, archivos, notas y correos electrónicos que contengan términos como “memecoin”, “token”, “$libra”, “solana”, “binance”, “kraken”. También, términos vinculados a malas prácticas financieras como “insider”, “sniper”, “rug pull” y “pump and dump”.
El análisis también abarca palabras clave relacionadas con la gestión pública, como “presidente”, “milei”, “karina milei”, “gobierno”, “olivos” y “casa rosada”, e imágenes de los acusados, en particular durante el evento Tech Forum o en edificios públicos como la Casa Rosada y la Quinta de Olivos.
Adicionalmente, el fiscal ordenó determinar la geolocalización de los dispositivos móviles de los investigados entre el 12 y 19 de julio del año pasado, y del 13 al 16 de febrero de este año, entre otros.
Un punto clave del oficio es la instrucción de que se determine si los teléfonos poseen aplicaciones descargadas correspondientes a exchanges o billeteras virtuales, como phantom y solflare. Más aún, la fiscalía exige que se identifique la existencia de contenido eliminado en cada dispositivo y se procure el recupero de esa información.