Al menos un hombre murió y cerca de 40 personas resultaron heridas en la madrugada de este sábado por la caída de varias estructuras durante un multitudinario festival de música en la ciudad española de Valencia. El incidente fue ocasionado por las fuertes ráfagas de viento que derribaron parte del escenario durante el festival Medusa Sunbeach Festival de la localidad valenciana de Cullera.
Según las primeras informaciones, cerca de las cuatro de la mañana se formó una impresionante tormenta de arena que ocasionó corridas, objetos volando sin control y pánico entre los asistentes. El Medusa Festival volvió este fin de semana a celebrarse y es considerado el evento musical más multitudinario de España. Los organizadores esperaban reunir a 320.000 personas hasta el domingo.
Las autoridades informaron que tanto la entrada principal del recinto como una parte del escenario principal se derrumbaron.
En tanto, los organizadores del festival señalaron que las inclemencias meteorológicas ocurridas esta madrugada han desalojado el recinto como medida preventiva y con el objetivo de garantizar la seguridad de los asistentes, y se “suspende definitavemente” la actividad.
Los organizadores del Medusa Festival de Cullera publicaron hoy un comunicado en el que aseguran sentirse “completamente desolados y consternados ante lo sucedido la pasada madrugada” y destacaron que se trató de un “fenómeno meteorológico de características devastadoras”.
“Hace unas horas, la localidad de Cullera y otras aledañas se han visto sorprendidas por inclemencias meteorológicas excepcionales que causaron diversos daños en la infraestructura de nuestro recinto. Hacia las 4 de la madrugada, un inesperado y violento vendaval asoló ciertas zonas del festival obligando a esta dirección a tomar la decisión inmediata de desalojar el área de conciertos para garantizar la seguridad de los asistentes, trabajadores y artistas congregados en Medusa Festival”, señala el comunicado.
“Desgraciadamente, el fenómeno meteorológico de características devastadoras hizo que algunas estructuras provocaran los inesperados hechos”, agregaron.
Según publicaron medios locales en base a informaciones aún no confirmadas orficialmente, se habrían alcanzado ráfagas de viento de alrededor de los 65 kilómetros por hora.
La Guardia Civil y la Policía local se dirigieron de inmediato al recinto para evacuar a los miles de asistentes, mientras los equipos sanitarios atendían y trasladaban a los heridos más graves a varios hospitales.
