Cuatro estadounidenses que viajaron a México el viernes para una cirugía estética y que quedaron atrapados en un tiroteo mortal y fueron secuestrados por narcos, fueron hallados este martes, informó el gobernador del estado norteño de Tamaulipas, Américo Villarreal. Dos de las víctimas murieron.
Los norteamericanos fueron emboscados por hombres fuertemente armados que los arrojaron en la parte trasera de una camioneta y se los llevaron. El secuestro dio lugar a una intensa búsqueda. Y el FBI ofreció 50 mil dólares por su liberación.
Durante una conferencia presidencial Villarreal dijo, en una llamada telefónica, que hace 35 minutos fue confirmado por la Fiscalía estatal el hallazgo de los estadounidenses y agregó que “de los cuatro hay dos de ellos fallecidos, una persona herida y la otra, ilesa”, pero no ofreció más detalles.
"Ya fue plenamente confirmado por la fiscalía, de los cuatro (estadounidenses) hay dos de ellos fallecidos, un persona herida y la otra con vida", dijo.
Villarreal no precisó el lugar donde fueron encontrados los rehenes, aunque las operaciones desplegadas por las autoridades mexicanas, en coordinación con agencias estadounidenses, se extendían por una amplia zona de Tamaulipas, al que pertenece Matamoros.
"Ahorita van las ambulancias y el resto del personal de seguridad a dar el apoyo correspondiente para el traslado y el apoyo médico que se pueda requerir", añadió el gobernador.
Por una cirugía estética
Los familiares de las víctimas habían contado que los secuestrados habían viajado para que uno de ellos, una mujer, se hiciera una cirugía estética.
Uno de ellos iba a hacerse una abdominoplastia -eliminación de grasa abdominal- en un pueblo fronterizo, dijo la hermana de una de las víctimas.
"Ver a un miembro de tu familia tirado en la parte trasera de un camioneta y arrastrado, es simplemente increíble", dijo Zalandria Brown a AP sobre su hermano Zindell Brown.
El FBI ofreció una recompensa de US$ 50.000 por su devolución.
Las otras personas del grupo han sido identificadas en medios estadounidenses como Latavia McGee (33 años), Shaeed Woodard y Eric James Williams.
Conducían a través de Matamoros, que está directamente al otro lado de la frontera con la ciudad de Brownsville, en Texas, en una minivan blanca con placas de Carolina del Norte cuando hombres armados no identificados abrieron fuego, dijo el FBI.
Un video muestra que hombres fuertemente armados los suben a una camioneta. Uno es maltratado en el vehículo mientras que otros parecen estar inconscientes y son arrastrados al vehículo.
Una mujer mexicana murió en el incidente, que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, calificó como un "enfrentamiento entre grupos armados". Dijo que su "gobierno entero" estaba trabajando para asegurar la liberación de los estadounidenses.
