La policía de Temple, Texas (Estados Unidos) arrestó a Amanda Nicole Martínez, de 31 años, una mujer acusada de arrojar sopa en la cara de una empleada de un restaurante durante un disturbio el 7 de noviembre en Sol De Jalisco.
Martínez está acusado de agresión que causó lesiones corporales. Fue arrestada y transportada a la cárcel del condado de Bell el miércoles por la mañana, dijo la policía.
“No toleramos este tipo de comportamiento y exigimos a nuestros ciudadanos el más alto nivel”, afirmó el subjefe de policía Allen Teston en el momento en que la policía comenzó a investigar el asalto.
“Si un ciudadano cree que ha recibido un mal servicio, le recomendamos que se mantenga civilizado hasta que se resuelva el problema”, agregó.
El incidente ocurrió a la 1:21 pm del 7 de noviembre cuando Martínez recogió un pedido en el restaurante de comida mexicana. Poco después regresó al local para quejarse de que la sopa que había ordenado estaba tan caliente que había derretido la tapa de plástico.
“Regresó al restaurante y comenzó un altercado verbal”, dijo la policía.
Sus quejas fueron recibidas por la gerente de la tienda, una joven que intercambió algunas palabras con la enojada clienta. El intercambio quedó grabado por las cámaras de seguridad del lugar en un video que muestra el momento exacto en que una exasperada Martínez estaba la sopa hirviendo y se la arroja en la cara a la mujer frente a la caja registradora.
“Se fue antes de que llegaran los oficiales”, agregó la policía.
Según declaraciones de Jannelle Broland, la gerente del local, ella se disculpó con la cliente y le ofreció un reembolso y otro plato del menú pero Martínez exigió hablar con otro gerente y al ver que no había más nadie del personal administrativo se molestó y le arrojó la sopa en la cara.
Las autoridades de policía dicen que están tratando el caso como un crimen, por eso han procedido con el arresto preventivo de Martínez mientras avanza la investigación. A la mujer también se le ha prohibido el ingreso al restaurante donde ocurrió la agresión.
De acuerdo con Broland, la víctima, no desistirá de los cargos contra su agresora, quien espera sea llevada ante la justicia y condenada a prisión.
