Yorwin José Quintero y su esposa Glenda Martínez fueron identificados por la Policía del estado venezolano como los responsables de drogar a una joven para robarle el pelo.
Según medios locales, Quintero trabajaba como vendedor ambulante en un sector llamado La Curva de Molina, donde le ofreció a una mujer 32 años unos caramelos que tenían droga.
En ese omento la víctima comenzó a sentirse mal y perdió la noción del tiempo, pero llegó a retener algunos detalles de lo ocurrido, que luego relató a los policías.
De acuerdo con su denuncia, tras ser secuestrada en la zona comercial, apareció una mujer con un turbante en la cabeza que la llevó hacia el callejón de una casa cercana.
Allí, con la complicidad de otra persona y la dueña de la vivienda, le cortaron el cabello.
La víctima recuperó la conciencia más tarde cuando se encontraba sentada en la Plaza Bolívar del oeste de Maracaibo, desorientada y sin saber cómo había llegado al lugar.
Con los datos aportados en la denuncia, los efectivos lograron ubicar la casa y descubrieron que la vivienda era alquilada por los dueños para que los delincuentes cometieran sus delitos.
"Entrevistamos a la propietaria de la misma, quien manifestó que prestó su casa para cortar pelo a una ciudadana de nombre Glenda Isabel Martínez Gómez y a su pareja Yorwin José Quintero, quienes le cancelan un dólar por cada corte que realizan", detalló el reporte policial.
Los agentes detuvieron a Quintero y lo pusieron a disposición del Ministerio Público. En tanto, su esposa escapó a Colombia, a donde viajó con el pelo.
