Una joven de 21 años fue detenida en Inglaterra acusada de hacerse pasar por un adolescente de 16 en Instagram con el fin de contactar a nenas de entre 14 y 16 para abusarlas. Se cree que logró engañar a entre 20 y 50 menores. La agresora se enfrenta a una pena de prisión perpetua.


Según trascendió, Gemma Watts se hizo un perfil falso en Instagram donde publicaba fotos de ella vestida de adolescente, con ropa holgada, corra y se recogía el cabello de modo que parecía que lo tenía muy corto. Además, se hacía llamar "Jake Waton".

De esa forma, intentaba disimular sus rasgos femeninos para hacerse pasar por un chico adolescente con el fin de contactar a sus víctimas, con las que hablaba durante semanas hasta ganarse su confianza y proponía un encuentro personal.

"Para algunas de estas chicas, se trataba de su primera relación. Eran jóvenes e inocentes, fueron engañadas por completo. Estos casos son increíblemente raros y su difusión es importante para destacar los peligros de las redes sociales", aseguraron fuentes judiciales del caso.

La agresora repitió su modus operandi hasta que, en una ocasión, convenció a una víctima de acompañarla a otra ciudad. Tras este episodio, comenzaron a investigarla y descubrieron la verdad. Watts se declaró culpable de tres delitos de abuso sexual.