
La líder de la extrema derecha francesa Marine Le Pen y otros ocho eurodiputados de su partido fueron declarados culpables este lunes por desvío de fondos del Parlamento Europeo.
El Tribunal Correccional de París indicará la pena impuesta a Le Pen, para quien la fiscalía pidió cinco años de cárcel, 300.000 euros de multa y cinco años de inhabilitación con carácter inmediato, lo que pondría en peligro su carrera política.
Casi tres millones de euros desviados
La presidenta del tribunal consideró probado el desvío de fondos entre 2004 y 2016 y calificó de «ficticios» los contratos de doce de los asistentes parlamentarios de los diputados europeos del partido en las tres últimas legislaturas.
Señaló que, aunque estaban a sueldo de la Eurocámara, en realidad trabajaban para el partido.
En total, la presidenta cifró en 2,9 millones de euros el dinero desviado, de los que 474.000 euros son imputables a Le Pen, que hizo pasar como asistentes parlamentarios a su guardaespaldas, Thierry Légier, y a su secretaria personal, Catherine Griset.
La sentencia considera que el sistema puesto en marcha por el partido «no condujo a un enriquecimiento personal» de los eurodiputados, pero sí «un confort de vida de los dirigentes del partido y un enriquecimiento del mismo».