Un hombre murió de un disparo en su rostro tras asomarse por una pared al escuchar tiros provenientes de la casa de un vecino. Se trata de Bruno Emídio da Silva Junior, de 33 años, quien perdió su vida el pasado sábado de forma trágica.
El hecho conmocionó al municipio de Apucarana, ubicado en el centro del estado brasileño de Paraná. Profesionales del Servicio Móvil de Atención de Emergencias (Samu) acudieron a socorrerlo pero fue declarado muerto en el lugar.
De acuerdo a lo que informó la Policía Militar, testigos dijeron que la víctima se encontraba en una fiesta, en el barrio Pirapó, cuando se escucharon disparos en la casa de un vecino. Acto seguido, Bruno subió a la terraza de la propiedad para comprobar, por encima de un muro, qué había sucedido. Fue en ese instante que el vecino le disparó en la cara y se dio a la fuga en un auto rojo.
La curiosidad mató al gato!
— CrónicaPolicial (@CronicaPolicial) March 14, 2024
Brasil ??: Un hombre curioso es baleado por su vecino y muere de forma instantánea ?? pic.twitter.com/019aE1OT1i
El periódico brasileño O Globo informó que el atacante aún no fue identificado y que, al llegar al lugar, poco después de las 23:00, los policías encontraron el cuerpo de Bruno tirado en el suelo mientras su pareja -que presenció todo el hecho, según se ve en las imágenes que circularon- le realizaba un masaje cardíaco para intentar reanimarlo.
Un arsenal en la casa del vecino
Apenas arribaron al barrio, los uniformados se trasladaron a la casa del vecino de la víctima, lugar donde se originó el ataque y del que se escuchaban disparos segundos antes de la muerte de Bruno.
En esa propiedad, la Policía encontró un rifle de aire comprimido modificado para calibre .22 con mira telescópica y una escopeta, además de 49 cartuchos intactos de diferentes calibres y otros 19 cartuchos detonados.
De acuerdo a lo que consignó el medio citado, también se encontraron dos cargadores de pistola calibre .380 encima de un armario.
Posteriormente, la Policía Científica incautó otras 11 fundas de pistola del mismo calibre, en un pasillo que conecta el frente con la parte trasera de la residencia.
Según la Policía Militar, el comandante policial de la unidad se comunicó telefónicamente con el responsable del tiroteo. El hombre le dijo al agente que “estaba cerca” del lugar, concertó un punto de encuentro con el equipo policial pero no se presentó, detalló O Globo.
La Policía Civil abrió una investigación para esclarecer el crimen. Hasta el momento se tomó declaración a los testigos y el sospechoso aún no fue localizado.
