La diputada del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil Maria do Rosario Nunes denunciará esta semana al presidente Jair Bolsonaro por el trato ultrajante que le dio a una niña youtuber con la que compartió una emisión de su programa semanal el jueves pasado.


En el programa, que se emite por redes sociales y la radio Jovem Pan, hubo toda clase de comentarios inapropiados para hacer frente a la youtuber Esther Castilho, de 10 años, pero el colmo llegó cuando el mismísimo Presidente de Brasil le preguntó a la niña por su "iniciación" cuando el doble sentido era más que evidente.
La escena causó la indignación de Nunes, una antigua rival de Jair Bolsonaro de cuando ambos integraban el Congreso de Brasil. "Estamos frente a algo extremadamente grave (..) vimos cómo el presidente habla con una niña de 10 años con doble sentido, con una connotación que refiere a la sexualidad", afirmó la diputada al diario Página 12.
Durante la charla Bolsonaro afirmó que no sabía qué es la misoginia y que le tuvo que preguntar a sus asesores. También deslizó nuevamente sus opiniones sobre el trabajo infantil o la no imposición de la vacuna contra el coronavirus que se desarrolla en Brasil.
Mientras tanto ahí estaba Esther Castilho, sonriente a pesar de los comentarios subidos de tono y completamente al margen de los chistes de los adultos.
Nunes, que es coordinadora del Frente Parlamentario de Defensa de los Derechos de los Niños, se remitió a la Constitución de Brasil y al Estatuto del Niño y el Adolescente vigente en ese país para denunciar al Presidente frente al Ministerio Público Fiscal.
"A él le gusta bromear sobre estos temas delicados con alusiones sexuales, como se vio ese programa", comentó la diputada.
Nunes tuvo sus propios encontronazos con Bolsonaro cuando el ahora mandatario era diputado por Río de Janeiro. De hecho, en 2014 el hombre llegó a empujar a la diputada frente a miembros de la prensa y en 2014 la amenazó de estupro en plena sesión legislativa.
Tres años más tarde el Superior Tribunal de justicia de Brasil condenó a Bolsonaro al pago de US$5.000 que luego Nunes donó a organizaciones feministas.
"Ese proceso fue muy comentado porque tocaba un tema como el estupro, era una amenaza contra mí, pero esta nueva representación es más grave, porque atañe a una personas indefensa, vulnerable, una niña y afecta los derechos de los menores", dijo Nunes al diario argentino.