La actriz se animó a hablar de su deseo de formar una familia y reveló el momento en el que decidió pasar por el quirófano para congelar óvulos.
Tras pasar por el quirófano para congelar óvulos, Natalie Pérez no la pasó nada bien. La actriz tuvo una hemorragia interna y debió ser internada de urgencia, pasando algunos días en el hospital.


Sin embargo, pese a ese incidente la actriz no se arrepiente de nada. En un diálogo con el programa "Agarrate Catalina", que conduce Catalina Dlugi, Natalie asegura que su deseo de ser madre es algo que siempre cruzo su vida aunque espera poder hacer de “forma natural”.
“Deseo con todo mi corazón no tener que usar mis óvulos congelados nunca, nunca, nunca, y poder tener hijos de forma natural”, dijo.
“Pero no se saben nunca estas cosas, es más preventivo que otra cosa. También puede pasar que tenga hijos y que a los cuarenta quiera tener otro. Es como un seguro”, reveló.

Además, la actriz contó cuando fue el momento que decidió congelar: “Fue cuando estaba haciendo Pequeña Victoria. Ahí terminé una relación muy larga que tuve y yo quería tener hijos joven. Todavía soy joven, así que me queda tiempo, pero quise hacerlo”.
Sobre la internación que debió atravesar tras la intervención contó: “Lo que me pasó no es lo más común, en todas las intervenciones hay riesgos. En esta hay un porcentaje mínimo y me tocó a mí. Tuve una hemorragia interna, me dolió mucho, y me tuve que quedar unos días ahí”.
Además, Natalie se animó a hablar se su presente sentimental: “Ahora estoy sola, aprovechando este momento de forma muy introspectiva. Para aprender a ser mejor, para cuando llegue ese nuevo amor estar preparada y no cometer los mismos errores de la relación pasada”.