La vida de los familiares de los futbolistas no es fácil. Y va más allá de los millones y de lo económico. Pasa por otro lado, por lo sentimental cada vez que hay que armar las valijas, dejar todo, y empezar de nuevo en otro país, como les está ocurriendo ahora a Wanda Nara y Mauro Icardi. Llevan tan sólo una semana en Estambul, Turquía, y ya hay conflictos familiares.
Sin lugar en el PSG de Francia, el delantero argentino firmó para el Galatasaray (debutó esta viernes 16), uno de los equipos turcos más importantes de ese país. Pero si bien para los más grades tal vez fue más sencillo, no tanto para los hijos, que dejaron toda una vida en París. Acá, quien lo está padeciendo, es Valentino, el más grande, fruto de su relación con Maxi López.
El nene tiene 13 años, ya todo un adolescentes, y con otras inquietudes. El tema es para todos, porque tanto él como sus hermanos: Constantino, Benedicto, Isabella y Francesca deberán cambiar de colegio, que hasta cambiarán de colegio, y los varones de club, ya que estaban en las divisiones inferiores del PSG.
Pero regresando a Valu, su tía, Zaira Nara, dejó al descubierto su triste momento. “Están gigantes mis sobrinos. Valentino es igual al papá, es igual a Maxi. Ya nos pasó a las dos de altura, calza 40, está re adolescente”. Y en esa respuesta que le dio a Ángel de Brito, el periodista retrucó: “Debe tener novia ya si tiene 13 años”.
Fue ahí cuando Zaira contó: “Sí, tiene novia. Me va a matar, pero no sé que va pasar porque los tiempos modernos de los chicos son raros ahora. Como cambió de país y no está más en París, supongo que no le va a gustar una relación a distancia, capaz se enamora de una turca”, finalizó, restándole importancia a los sentimientos del pequeño.
