La charla sobre la caída de Susana Giménez en Intrusos fue virando lentamente hasta provocar que Jorge Rial, de manera sopresiva, no solo revele que sufrió el acoso de una fanática con un trastorno mental hace mucho tiempo, sino también que lance un contundente palito para destrozar a su exesposa, Silvia D'Auro, de quien se divorció en medio de un escándalo en 2012.


El conductor de América leyó el mensaje publicado por Lorna, la histórica seguidora de la diva de los teléfonos, que lamentó el accidente que su ídola sufrió en Punta del Este, y por esto reflexionó y les comentó a sus compañeros que “todos se merecen una Lorna en sus vidas”.

Sin embargo, luego de que Débora D'Amato y Rodrigo Lussich le señalaran que hay casos en donde el fanatismo es llevado al extremo y hay admiradores invasivos, el periodista reveló la terrible experiencia que vivió años atrás. “Yo tuve una, y con problemas psicológicos. Un día me manoteó la puerta del auto para entrar”, comenzó Rial su relato.

“Un día paró acá y me dijo: 'Llevame a un hotel'”, contó el presentador de televisión y radio, que para rematar su historia, apeló al humor y la ironía contra la mujer con la que estuvo en pareja durante dos décadas.

“Yo le dije una frase que no era verdad en ese momento, le dije 'estoy felizmente casado'”, lanzó con una carcajada Jorge, causando también las risas de Adrián Pallares y el resto del panel. “Entiéndanme que había que mentir ahí, había que zafar”, aseveró el periodista de espectáculos.
Le di con lo peor que tenía
“En ese momento, esa frase fue mágica. Le di con lo peor que tenía, saqué la peor arma. Era el arma masiva de destrucción. Si tenés la boa constrictora apretándote, ¿qué vas a hacer? ¡Zas! Y le cortás la cabeza. Igual en ese momento no sirvió de nada. Me corrió y me quiso abrir la puerta del auto en movimiento”, continuó el hoy esposo de Romina Pereiro, afirmando además que esta fanática suya luego fue internada en un psiquiátrico, y que uno de sus productores, Julián León, fue testigo de cómo ella lo seguía por la calle.
“Se escondía atrás de los árboles hasta que un día la policía actuó y terminó internada”, concluyó la anécdota el hombre al frente de Intrusos, deseando también que si esta mujer fue dada de alta, no vaya a visitarlo de nuevo.
Casualmente, un día antes el exconductor de Gran Hermano también hizo un duro comentario vinculado a D'Auro. Fue al recordar su trabajo en el reality de encierro y la gran cantidad de trabajo que tenía en 2007. “Había que agarrar el mango y era un buen momento. Agarré, pero después se me fue más de la mitad, se me fue casi un 70 %”, precisó el padre de Morena y Rocío, aludiendo claramente a la división de bienes con Silvia.