Todo comenzó cuando Verónica Ojeda iba en su camioneta por la Ruta provincial 210 y fue detenida por un control policial que le habría pedido su pase de circulación.
Al parecer, la ex del Diez mostró su pase a través de la app Cuidar y allí estaba registrada como "funcionaria pública". Además, habría explicado que quería trasladarse desde su casa en Ezeiza a una quinta en Loma Verde.

Según la denuncia, un inspector municipal que estaba junto a los tres Policías le dijo que no podía circular hasta que cotejaran la información con la base de datos en la que se encuentran todos los exceptuados.
El problema habría comenzado en ese momento ya que Ojeda habría esgrimido que su novio era "Mario Baudry", el jefe de gabinete de Sergio Berni, y que lo llamaría para "resolver el problema".

En el teléfono, Baudry habría exigido que dejen ir a su pareja y, finalmente, uno de los oficiales la habría dejado seguir con la camioneta. Pero, el problema no terminó allí ya que, según sostiene la denuncia, el novio de Ojeda también se acercó en su auto al lugar.
"Descendió sin el barbijo colocado y se dirigió hacia la cabina del puesto policial, ingresando para reunirse con la totalidad del personal policial, durante alrededor de 10 minutos y luego retirarse", detalló Marcelo Carrillo, secretario de Protección Ciudadana y Habilitaciones de Bransen, en diálogo con La Nación.
"El oficial le pidió a Ojeda que exhibiera ese permiso y nunca lo mostró. Así que, además de violar el ASPO, podría haber estado efectuando una usurpación de títulos y honores. Por otro lado, Baudry violó los protocolos que se les pide a todas las personas que cumplan. Incluso, parecía tener un estado gripal y encerró al personal en un espacio de dos metros por dos metros, sin respetar el distanciamiento social preventivo. No quiero hablar de apriete, pero si de avasallamiento", agregó.