Con la semifinal de la Copa Libertadores acercándose, River Plate ajusta los últimos detalles para el primer cruce ante Atlético Mineiro el próximo martes 22 de octubre a las 21:30 en Belo Horizonte.
La gran preocupación de Marcelo Gallardo y su cuerpo técnico son las bajas defensivas que sufrió el equipo en el último encuentro ante Platense, donde Germán Pezzella, Fabricio Bustos y Marcos Acuña tuvieron que retirarse por molestias musculares.
Mientras Pezzella se unió a la Selección Argentina tras confirmarse que su lesión no era grave, Bustos fue diagnosticado con un desgarro grado 1 y es duda para los próximos compromisos.
Por su parte, Acuña, que había quedado desafectado del seleccionado por una distensión en el isquiotibial izquierdo, sorprendió con una recuperación rápida que lo devolvió al campo de juego antes de lo esperado.
Durante la semana, el Huevo Acuña realizó trabajos de kinesiología y gimnasio, y en los últimos días completó ejercicios con pelota, lo que le permitió volver a entrenar con el grupo. Esta noticia trajo alivio a Gallardo, que podrá contar con el lateral izquierdo para el crucial choque en Brasil.
Antes del compromiso internacional, River tiene un desafío clave en la Liga Profesional: enfrentará a Vélez Sarsfield, actual líder del campeonato, el viernes 18 de octubre. Con una diferencia de 11 puntos entre ambos equipos, el partido será decisivo para las aspiraciones del Millonario en el torneo local.
Sin embargo, las dudas sobre la condición física de Pezzella y Acuña podrían llevar a que Gallardo decida reservar a ambos jugadores para evitar recaídas y tenerlos al 100% para el duelo ante Mineiro.
Con la recuperación de Acuña y la chance de que Pezzella también esté disponible, el Millonario apunta a llegar con su defensa lo más completa posible a la semifinal de la Libertadores.