
Al calor y humedad que deben afrontar los pilotos de Fórmula 1 en cada edición del Gran Premio de Singapur, Franco Colapinto también debió conducir en las calles de Marina Bay con el indócil Alpine A525 a bordo del cual resistió hasta donde pudo con el acecho de sus rivales, terminando 16° con una vuelta menos que el Mercedes del ganador George Russell.
En el comienzo, el piloto argentino utilizó un juego de neumáticos blandos y con ello su auto se mostró con buena prestación y le permitió concretar una muy buena largada en la cual llegó a superar a Lance Stroll (Aston Martin), Gabriel Bortoleto (Sauber) y Yuki Tsunoda (Red Bull), para llegar al 13° lugar hasta que la escudería de Enstone lo llamó a boxes para cambiar caucho en la vuelta 14.
Con gomas de compuesto medio retornó a pista ocupando el 18° lugar de la fila india, y con esos neumáticos completó el resto de los 61 giros, fluctuando en las posiciones y conteniendo cuanto pudo a sus rivales, entre ellos el alemán Nico Hülkenberg (Sauber) con quien tuvo un leve roce cuando defendía el puesto; luego este protagonizó un trompo en otro intento por sobrepasarlo.
La degradación del caucho afectó la estabilidad del Alpine sobre los últimos tramos de la carrera, en donde si bien había llegado a ocupar provisionalmente el 12° puesto posteriormente fue relegado -además del grupo de vanguardia- por Carlos Sainz (Williams), Stroll, Albon y Liam Lawson (Racing Bulls), para terminar 16°, el mismo puesto en el cual comenzó.