Estudiantes las tuvo todas consigo desde el principio y venció claramente a Fortaleza de Brasil por 3 a 0 para asegurarse su clasificación a los cuartos de final de la Copa Libertadores de América, en un encuentro disputado esta noche en La Plata.
El uruguayo Manuel Castro abrió el marcador a los 9 minutos del primer tiempo, luego aumentó a los 2 del segundo, y Franco Zapiola convirtió el tercero sobre los 13 del complemento.

Fortaleza, por su parte, jugó con diez hombres desde los 21 minutos del primer período, cuando se fue expulsado Yago Pikachu, por juego brusco, a instancias del VAR.
En la próxima instancia, el conjunto platense se enfrentará a Atlético Paranaense de Brasil.
Desde el comienzo Estudiantes empezó a definir la serie, porque se puso en ventaja rápidamente, gracias a un gran cabezazo de Castro, y luego pasó el único momento de zozobra tras un remate de Yago Pikachu que se le escapó a Andújar y dio en el travesaño.
Después, Pikachu le dio un planchazo a Boselli, vio la tarjeta roja y prácticamente sepultó las chances de su equipo para remontar la serie. Abajo en el marcador y con un hombre menos para Fortaleza fue demasiado.
El local siguió jugando con tranquilidad, anotó un segundo gol, luego anulado por el VAR, pero no pasó mayores contratiempos, siguió buscando, tuvo chances claras pero falló en la definición, mientras su rival se defendía y apostaba al contragolpe, pero estaba claro que ya había dejado de lado cualquier intención ofensiva
Apenas iniciado el segundo tiempo, Castro aprovechó un centro de Más desde la izquierda y volvió a marcar de cabeza para darle más tranquilidad a Estudiantes, que tenía todo controlado. Además, el equipo platense tuvo una gran ayuda en el tercer gol, cuando el arquero Boeck le entregó el balón a un rival, aprovechó el recién ingresado Zapiola y definió por debajo del cuerpo del golero.
Faltaba media hora y el partido estaba resuelto, pero Estudiantes reguló el ritmo, manejó el balón y ocupó los espacios como debía para llevarse un triunfo más que merecido para dar otro paso en busca de un sueño, aunque no sea el gran favorito.