Un sargento penitenciario fue tomado como rehén por internos en la Comisaría Quinta de la ciudad neuquina de Centenario. Tras algunas negociaciones, los presos liberaron al celador, quien resultó ileso, pero estaba en estado de shock.
El hecho ocurrió de las 18.50 del lunes cuando los internos tomaron al guardiacárcel como rehén al momento de ingresar a un detenido que regresaba de una salida por razones médicas y, sin emplear armas ni violencia, plantearon demandas que incluían traslados, mejoras en el mobiliario y en las condiciones de visita, así como la provisión de elementos de limpieza.
Según informó Neuquén 7, el tenso incidente culminó cerca de las 23 y el comisario Félix Caporaso, Coordinador de la Zona Periferia II, indicó que el equipo de negociadores de la Policía logró un diálogo calmado con los internos, lo cual permitió evitar un desenlace violento.
Luego de unas tres horas de tensiones y negociaciones, el celador fue liberado y atendido por personal médico debido al impacto emocional sufrido y su estado de salud fue considerado estable tras ser examinado también por psicólogos de la institución.
Según Caporaso, este tipo de incidentes es inusual en la Comisaría Quinta y no se habían registrado casos similares en su gestión. Sin embargo, indicó que la situación constituye una alerta y obliga a reforzar las medidas preventivas en otras unidades de detención.
El motivo de la protesta de los internos parecía centrarse en condiciones de alojamiento y en la necesidad de un espacio adecuado para recibir visitas. Aunque se accedió a algunos de los pedidos, las demandas de traslado de internos se analizarán en función de la situación de cada uno. De los trece internos involucrados, sólo uno cuenta con condena firme y será trasladado en breve.
Además, se informó que la Policía desplegó un operativo de seguridad, que incluyó el corte temporal de calles aledañas para evitar riesgos a vecinos y transeúntes. La calma fue restaurada en la zona una vez finalizada la negociación, y no se reportaron incidentes adicionales.
Caporaso aseguró que este tipo de eventos puede repetirse en cualquier unidad, pero el cuerpo policial está preparado para gestionar estas situaciones mediante su equipo de negociadores y medidas de contención. La Comisaría Quinta retomó sus actividades normales y el celador se encuentra en recuperación, apoyado por su familia y el equipo de profesionales de la institución.