Unos minutos después de que Roberto García Moritán concretó su renuncia, las cámaras de televisión fueron a buscar a Pampita para tener su palabra a la salida de las grabaciones de Los 8 escalones. Frente a los micrófonos estuvo al borde del llanto, desmintió algunas delicadas versiones e incluso defendió al padre de su hija.
“Estaba grabando. No sabía nada, así que...”, comenzó señalando la conductora a LAM cuando le consultaron por la salida del padre de su hijo, en medio de graves denuncias. “¿Sabías que te van a llamar a declarar?”, indagaron los cronistas y Carolina fue rotunda. “Eso no es verdad”, le dijo a Rafa Juli, notero de Intrusos, molesta. “No digas cosas que no son verdad. Eso no es verdad. Estas diciendo algo que no es cierto”, lanzó.
“Me estoy enterando por ustedes”, afirmó, mientras se subía a un auto al consultarle por el anuncio que había realizado el economista unas horas antes desde sus redes sociales. Después habló sobre cómo estaba atravesando estos últimos días: “Estoy tratando de estar bien por mi familia porque tengo chicos que criar. Tengo que estar en pie para criar a mis hijos”.
También se negó a hablar de las declaraciones que había realizado la madre de García Moritán y lanzó una fuerte frase. “No voy a contestar nada. Tengo que cuidar a mi familia y Roberto va a ser siempre mi familia, así que no voy a decir nunca nada en ningún lado. No va a pasar ni esta semana, ni la que viene. Nunca”, enfatizó, con la voz quebrada y los ojos vidriosos.
“Me apoyo en mis hijos que son mi motor y me dan fuerza para todo. Por suerte tengo esa fuente de amor que todos los días me da ganas de vivir, de salir a trabajar, de mejorar y de salir adelante”, aseguró.
“Sobre las acusaciones que se le hacen a tu marido, ¿qué se te pasa por la cabeza y el cuerpo?”, le preguntaron. “Que ojalá pidan disculpas todos los que dijeron tantas mentiras estas semanas, pero bueno. Eso en la tele no suele pasar”, arrojó. “Ojalá le dediquen el mismo tiempo de estas cosas a cuando se sepa la verdad para aclarar las cosas”, apuntó, sobre todo lo que se viene diciendo sobre el economista y su separación.
“Yo hace mucho que estoy en los medios y sé lo tremendo que es de expuesto. Es una presión muy grande. No es fácil esta carrera”, analizó, con dureza. “Sé lo difícil que es tener a ustedes de enemigos, pero uno elige la profesión porque le gusta, le apasiona y si es estás expuesto parece que te la tenés que bancar, pero no es fácil estar bajo tanta presión”
“Tengo que estar bien. Eso es lo que estoy tratando de hacer. Volviendo a la rutina del trabajo, conteniendo a mi familia”, expresó. Hacia el final respondió acerca de si creía en las denuncia por corrupción que pesa sobre él. “Eso lo va a aclarar la Justicia y espero que pidan disculpas cuando eso pase”, concluyó.
Unas horas Pampita había expresado su enojo al ser abordada por los periodistas en su entrada al estudio donde graba el ciclo de Guido Kaczka. “Pensé que ayer habíamos aclarado todo ¿No hablamos ayer de todo?”, señaló. Pero los cronistas comenzaron a hacerle preguntas, la mayoría referida a las declaraciones de su ahora exsuegra, pero se mantuvo firme en su postura y no dio detalles de su separación.
“Ya les dije, no voy a hablar nada de esto. Por favor, déjenos vivir en paz, volver a la normalidad, volver a trabajar normal como siempre. Un beso a todos”, fue todo lo que comentó ante la prensa, sin perder la sonrisa. Una vez que llegó a la puerta del estudio, se tomó el tiempo de sacarse una fotografía con un fanático; ingresó y saludó con un beso a cada una de las personas que la esperaban allí dentro