Los principales mercados bursátiles subieron y el dólar se apreció el martes, mientras los inversores seguían de cerca la guerra comercial entre China y Estados Unidos, con especulaciones sobre la posibilidad de que los líderes de ambos países mantengan pronto conversaciones.
Tras un periodo de relativa calma en materia de aranceles, el presidente estadounidense, Donald Trump, acusó a Beijing el fin de semana de violar el acuerdo del mes pasado para reducir los enormes aranceles recíprocos y amenazó con duplicar los aranceles sobre el acero y el aluminio.

“Las tensiones comerciales amenazaron con provocar una fuerte venta masiva el lunes, antes de que la noticia de que el presidente Trump y el presidente Xi (Jinping) hablarían por teléfono ayudara a calmar los temores”, dijo Kathleen Brooks, directora de investigación de XTB.
Las bolsas de Hong Kong y Shanghái cerraron al alza el martes, y los principales índices bursátiles de Wall Street avanzaron en las operaciones de mediodía.
El analista de Trade Nation, David Morrison, señaló que los inversores habían ignorado en gran medida las noticias negativas sobre la economía relacionadas con los aranceles de Trump.
“Muchos siguen convencidos de que las guerras comerciales de Trump pronto llegarán a su fin, quizá basando esta opinión en el acrónimo “TACO”, que significa “Trump Always Chickens Out” (Trump siempre se acobarda)”, afirmó.
Los principales índices europeos también subieron a pesar de la caída del Gobierno neerlandés.
El líder de extrema derecha neerlandés Geert Wilders retiró a su partido del Gobierno en una disputa sobre la inmigración, lo que provocó la caída de una coalición inestable y probablemente dará lugar a elecciones anticipadas.
La retirada abre un periodo de incertidumbre política en los Países Bajos, la quinta economía más grande de la Unión Europea y un importante exportador, ya que los partidos de extrema derecha están ganando terreno en todo el continente.
Los Países Bajos forman parte de la zona euro, donde los datos oficiales del martes mostraron que la inflación de la zona se moderó en mayo hasta su nivel más bajo en ocho meses, por debajo del objetivo del 2 % del Banco Central Europeo.
Ya se esperaba que el BCE recortara los tipos de interés de la zona euro esta semana, lo que ejerció presión sobre el euro.
El principal índice bursátil Euronext Amsterdam cayó inicialmente tras la caída del Gobierno, pero cerró la jornada con una pequeña subida.
La atención se centró firmemente en Estados Unidos y China.
Funcionarios de ambas partes se reunirán al margen de la reunión ministerial de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que se celebrará el miércoles en París.
La OCDE recortó el martes sus previsiones de crecimiento para la economía mundial en 2025 del 3,1 % previsto anteriormente al 2,9 %.
También afirmó que la economía estadounidense crecería un 1,6 %, frente al 2,2 % estimado anteriormente.
La organización señaló que el “aumento sustancial” de las barreras comerciales, el endurecimiento de las condiciones financieras, la disminución de la confianza de las empresas y los consumidores, así como la mayor incertidumbre política, tendrían “efectos adversos notables sobre el crecimiento” si persistieran.
“Para todos, incluido Estados Unidos, la mejor opción es que los países se sienten a negociar y lleguen a un acuerdo”, declaró a la AFP el economista jefe de la OCDE, Álvaro Pereira.
Los datos del martes indicaron que la actividad industrial china se contrajo a su ritmo más rápido desde septiembre de 2022.
También fue objeto de atención el emblemático “gran y hermoso proyecto de ley” de Trump, encabezado por recortes fiscales que se prevé que añadan hasta 3 billones de dólares a la deuda nacional en un momento de creciente preocupación por las finanzas del país.
Los senadores estadounidenses han iniciado lo que sin duda será un intenso debate sobre el paquete de medidas, que incluye en parte una prórroga de la desgravación fiscal de Trump de 2017 mediante recortes presupuestarios que, según las previsiones, privarán de asistencia sanitaria a millones de estadounidenses con bajos ingresos.
Los precios del crudo subieron ante la preocupación de que los incendios forestales en Canadá pudieran afectar al suministro de petróleo.