El hecho se habría presentado el pasado viernes 26 de abril, cuando Saldarriaga se asomó en la ventana de su casa y vio un jíbaro vendiendo marihuana a un grupo de jóvenes. Molesto les exigió que fueran a consumir el estupefaciente en otro lado.
Los jóvenes enfurecidos se fueron, pero regresaron al poco tiempo con un galón de gasolina que rociaron por fuera de la vivienda y dentro de ella a través de las ventanas, y acto seguido la prendieron en fuego con Saldarriaga dentro.
"Estaban vendiendo alucinógenos a las afueras de la casa de mi tío, él salió a hacer el reclamo, que se hicieran en otro lado, y uno de ellos le dijo que lo iban a quemar sí seguía molestando, y efectivamente él se fue a dormir y le rociaron gasolina", contó Felipe Saldarriaga, sobrino de la víctima, a RCN Radio.
Las llamas se extendieron muy rápido y el hombre no alcanzó a salir de su casa. Por su parte, los vecinos fueron quienes llamaron al cuerpo de Bomberos de Cali, mientras ellos mismos intentaban extinguir las llamas y rescatar a la víctima.
Los bomberos lograron apagar el incendio antes de que afectara otras viviendas aledañas, con dos máquinas extintoras y un carro tanque de agua. Y el hombre fue trasladado de inmediato al hospital Universitario del Valle; detalla RCN Radio.
En la unidad de quemados de ese centro médico permanece Saldarriaga bajo pronóstico reservado, con quemaduras de primer y segundo grado en todo su cuerpo. Mientras esperan su recuperación, sus familiares exigieron a las autoridades que capturen a los responsables.
La Policía Metropolitana de Cali y el CTI de la Fiscalía ya abrieron una investigación por el caso, y realizan el trabajo para dar con la identidad de los autores para poder emitir órdenes de captura en su contra.
Diario Panorama