Ese lazo invisible, pero poderoso e indestructible. El vínculo con los perros es mágico y se erige en una relación de amor, compañerismo, complicidad y diversión para toda la vida. Lo que sucede no se explica, solo se experimenta y disfruta a rabiar.
Los argentinos suelen estimular la pasión por las mascotas, en una enorme porción de hogares pululan caninos que se constituyen en un miembro más de la familia. En esa línea se enrola Iván de Pineda, que cultiva una relación hermosa con su querido perro Mervyn.
No solo el nombre es llamativo, sino que la raza, que se trata de un Irish Wolfhound y principalmente su tamaño, porque el can dispone de unas medidas impresionantes. El cuadrúpedo mide 80 centímetros y pesa 63 kilos, de hecho, al pararse en dos patas puede llegar a una extensión titánica.
Iván presentó a su mascota, se fotografió con él y habló de su lazo con una revista especializada, Ohmydog. En ese diálogo, el animador de televisión relató: “Mervyn tiene ya 5 años y pesa 63 kilos! Es un perro tranquilo, paciente, leal y muy cariñoso. Es ágil y con una gran personalidad. Se lleva muy bien con todos, pero sobre todo con mis sobrinos”.
A la hora de aportar datos históricos de esta raza tan especial Pineda, manifestó: “Este perro tiene sus orígenes en el siglo IV en los pueblos celtas de Irlanda. Es un can extremadamente cariñoso y de muy buen temperamento. Claramente no es ningún perro guardián”.