Justin Bieber vuelve al centro de la polémica tras la filtración de documentos que exponen una deuda millonaria con su exmánager Scooter Braun, derivada de incumplimientos contractuales durante su última gira. La situación financiera del cantante, sumada a señales preocupantes en su comportamiento público, ha despertado preocupación tanto en su entorno como entre sus seguidores.
Según informes de TMZ, Bieber habría incumplido múltiples fechas de la gira Justice debido a problemas de salud mental, lo que ocasionó pérdidas millonarias que debieron ser cubiertas por Braun y la compañía HYBE. El monto original superaría los 24 millones de dólares, de los cuales el artista firmó un pagaré a 10 años. Sin embargo, el flujo de pagos se habría interrumpido tras los primeros meses.


Una auditoría contratada por HYBE determinó recientemente que, pese a un pago parcial de 26 millones, Bieber aún adeuda 8 millones de dólares, lo que equivale a unos 160 millones de pesos mexicanos. La cifra reavivó especulaciones sobre su estabilidad económica y capacidad de gestión financiera.
La controversia llega en medio de rumores sobre un deterioro en su salud mental y un posible aislamiento familiar. En redes sociales, fans han expresado preocupación ante el aspecto desmejorado del cantante y su comportamiento errático, alimentando versiones de una posible recaída en el consumo de sustancias.
Incluso se ha filtrado que Hailey Bieber, su esposa, habría consultado a un abogado para evaluar la posibilidad de establecer una tutela legal, al estilo del caso Britney Spears, con el fin de proteger el bienestar personal y financiero del artista.
Fuentes cercanas al entorno de Bieber sostienen que el cantante "gasta más de lo que gana" y que ha perdido contacto regular con familiares y amigos. El episodio pone en evidencia la presión y fragilidad emocional que rodean a muchas figuras del pop global, especialmente aquellas que, como Bieber, han estado bajo los reflectores desde una edad temprana.