Independiente Rivadavia superó por 1-0 a Estudiantes de Caseros en el Estadio Provincial Juan Gilberto Funes, en el marco de los 32avos de final de la Copa Argentina. Con un único gol de Alejo Osella, la Lepra mendocina sacó boleto a la siguiente ronda, donde ya lo espera Platense.
Fue un partido cerrado, con pocas emociones, pero el peso de la Primera División se hizo sentir. A la Lepra no le sobró nada, pero tampoco necesitó mucho más: posesión equilibrada, algunos remates más al arco y un gol que marcó la diferencia frente al Pincha de Caseros.
La jugada clave llegó a los 17 minutos del primer tiempo. Un córner bien ejecutado encontró la cabeza de Alejo Osella, quien se desmarcó con claridad y definió ante una salida floja del arquero Matías Budiño. Ese tanto bastó para que el equipo mendocino se cerrara bien atrás y controlara el resto del encuentro sin sobresaltos.
Con este resultado, Independiente Rivadavia avanza en el torneo más federal del país y ya piensa en su próximo desafío: Platense, por los 16avos de final.