Independiente volvió a dar señales de vida. Primero ante Platense y ahora con otro triunfo 3 a 0 frente a Atlético Tucumán, el equipo de Gustavo Quinteros confirmó su resurrección y alimenta el sueño de meterse en los playoffs del Torneo Clausura y en la Copa Sudamericana 2026.
Con 12 puntos en 14 fechas, el Rojo dejó atrás a Godoy Cruz y Platense, y salió del último lugar de la Zona B. Aún lejos, pero con esperanzas: quedó a cinco unidades de Talleres, último clasificado a octavos, y también a cinco de Lanús, que hoy ocupa puesto internacional. El panorama se aclara un poco más si se liberan cupos por títulos de equipos argentinos en copas o en el torneo local.


Desde la llegada de Quinteros, el cambio es visible. Tras dos empates y dos derrotas iniciales, el técnico logró dos victorias seguidas con un equipo mucho más intenso y confiado. Rey respondió cuando fue exigido, Lomónaco y Valdez mostraron firmeza, Loyola fue determinante —participó en los dos primeros goles y marcó el tercero de cabeza—, y Millán fue puro sacrificio. Arriba, Ávalos volvió a ser clave: participó en el tanto de Abaldo que abrió el partido y luego amplió con un zurdazo tremendo.

El Decano, en crisis, sigue sin levantar. Dirigido interinamente por Hugo Colace tras la salida de Lucas Pusineri, acumula tres derrotas al hilo y 14 partidos sin ganar como visitante. Está a solo cuatro puntos de la zona roja y deberá reaccionar rápido ante Godoy Cruz, su próximo rival directo.