Un trágico derrumbe en una obra de construcción en Madrid ha dejado como saldo cuatro muertos y varios heridos. El colapso ocurrió el martes por la tarde en un edificio ubicado en la calle Hileras, a metros de la Plaza de Ópera y la Puerta del Sol. Entre las víctimas fatales se encuentran tres obreros originarios de Ecuador, Malí y Guinea, además de una supervisora de la obra, todos empleados de la constructora ANKA.
El siniestro se produjo cuando cedió el forjado de la sexta planta del edificio de seis pisos, arrastrando la estructura completa hasta la planta baja. Bomberos y equipos de rescate trabajaron toda la madrugada del miércoles para recuperar los cuerpos de las víctimas. Perros adiestrados y drones fueron utilizados para facilitar la búsqueda en lo que quedó de la estructura. La operación finalizó por la mañana, con la recuperación de los dos últimos cuerpos.
Las víctimas fueron localizadas tras un arduo trabajo de estabilización de la fachada. Los bomberos, junto con la Policía Municipal de Madrid, confirmaron que ya no existía riesgo de colapso en el inmueble, lo que permitió que los vecinos de los edificios colindantes pudieran regresar a sus hogares. Durante las tareas de rescate, también se reportaron tres personas heridas menores.
El edificio, que llevaba años abandonado, estaba siendo reformado para transformarse en un hotel de lujo. El proyecto fue impulsado por un fondo saudí y estaba previsto para finales de 2026, con 122 habitaciones distribuidas en seis plantas. La licencia de la obra fue otorgada en febrero de este año y estaba en regla desde el punto de vista urbanístico. Sin embargo, el colapso ha desatado una investigación sobre las posibles causas del accidente.
El alcalde madrileño, José Luis Martínez-Almeida, expresó su pesar por la tragedia en redes sociales, y envió su apoyo a las familias y compañeros de las víctimas. “Todo nuestro cariño y apoyo a sus familias, amigos y compañeros en este durísimo momento”, expresó el alcalde. Por su parte, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, también ofreció sus condolencias a los afectados.
Vecinos del barrio describieron el momento del colapso, afirmando que escucharon un fuerte estruendo antes de que el aire se llenara de polvo y un olor extraño. Según el testimonio de algunos residentes, el edificio llevaba mucho tiempo abandonado y las obras de reforma se iniciaron hace apenas cuatro meses. La tragedia ha dejado una profunda conmoción en la comunidad, que ahora espera respuestas sobre las causas de este fatal accidente en el corazón de Madrid.