Contra viento, marea y bajo presupuesto, el 2ª FIC UBA, Festival Internacional de Cine de la Universidad de Buenos Aires, arranca mañana con funciones en la sala mayor del Gaumont, dos salas del Cultural San Martín, el Cosmos, y el Aula Magna, la Sala Feldman y otras partes de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, en Ciudad Universitaria.
La inauguración oficial en el Aula Magna tiene un atractivo adicional: por sus aportes al cine nacional (y su defensa de la educación pública) Mirtha Legrand y el director y productor Héctor Olivera recibirán el título de doctores honoris causa de la Universidad Nacional de Buenos Aires.

Cabe una observación: Mirtha ya tuvo título de doctora. Fue en 1949, en “La doctora quiere tangos”, donde hacía pareja con Mariano Mores. Una lástima que esa deliciosa comedia no pudo ser programada. En el Gaumont solo darán sus piezas dramáticas, entre ellas “Bajo un mismo rostro”, donde cambiaba roles con su hermana Silvia (una era monja, la otra no). De Olivera se verá, entre otras, “La Patagonia rebelde”, clásico que ya cumple 50 años, y en una de cuyas funciones Luis Brandoni recibirá un reconocimiento a su trayectoria.
Otra figura iba a recibir el título de honoris causa, la iraní exiliada en Francia Marjane Satrapi. No pudo venir, pero dará una charla online. De ella se verá toda su obra, desde el dibujo “Persépolis”, ácida memoria de su infancia, hasta la reciente “Paradis Paris”, con Monica Bellucci y André Dussolier.
Sin doctorado académico por el momento, Demián Rugna (“Cuando acecha la maldad”) también tiene una pequeña retrospectiva. Es en Ciudad Universitaria, a cielo abierto, e incluye una noche de aquelarre con cosplayers, talleres de maquillaje y FX y otras atracciones.
Algo más serios, también habrá un seminario de autores locales y europeos, talleres, competencias de largometrajes y de cortos nacionales, internacionales y estudiantiles, charlas sobre técnicas actuales y problemas eternos del audiovisual argentino, variadas presentaciones especiales, un concierto de música de películas a cargo de la Banda Sinfónica de la Ciudad y, renglón especial, el clásico “Rosaura a las diez” (Mario Soffici, 1958, con Juan Verdaguer y Susana Campos) en la versión restaurada que se presentó este año en Cannes, es decir, copia nueva, mejor sonido y pantalla panorámica gracias al AlexScope, el cinemascope creado en la Argentina por la recordada empresa Alex.
Algo sobre la competencia principal. Participan 12 películas, desde la romántica alemana “Falling into place” (Aylin Tezel) filmada en las Islas Británicas. hasta la china “Arsleng” (debutante Ulaannars) filmada en las estepas de Mongolia, sobre un viudo y un perro. A señalar, “El sonido de la noche” (Eva Pereira, Brasil), drama nordestino con un titulo original más atractivo: “O barulho da noite”, donde una niña percibe el posible adulterio de la madre.
Por la Argentina, “Lo que quisimos ser” (Alejandro Agresti, con Eleonora Wexler y Luis Rubio, historia sentimental), “La vida en un tornado” (Vanesa Farabella, sobre M. L. Attinger de Schwarzkopf, valiosa investigadora de estas pampas), “Legerin, en busca de Alina” (María Laura Vázquez, sobre Alina Sánchez, médica cordobesa convertida en heroína del Kurdistan) y “Hermanados” (Sebastián Suárez y Diego Morel, comedia sentimental sobre el inesperado vínculo de un hombre que se cree “normal” con un muchacho down que atiende un bar). Todo el festival, con entrada libre y gratuita.