El espectacular recibimiento de River Plate en el Monumental -por la revancha de semifinales de la Copa Libertadores frente a Atlético Mineiro, con bengalas, pirotecnia y otros artefactos prohibidos- ha traído repercusiones negativas para el club.
El Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires aplicó una doble sanción: una clausura administrativa inmediata y el cierre de la tribuna Centenario Alta para el partido del sábado contra Banfield, por la Liga Profesional de Fútbol.
Ante esta decisión, Jorge Brito, presidente del club de Núñez, expresó su disconformidad y criticó duramente la medida. "Estoy totalmente en contra de la decisión del Ministerio de Seguridad del GCBA de clausurar la tribuna Centenario Alta por el recibimiento histórico que hicimos ayer”, declaró Brito en sus redes sociales. Además, resaltó que otros clubes sudamericanos no enfrentan sanciones similares en circunstancias comparables, haciendo una alusión a los equipos brasileños que suelen recibir a sus rivales con grandes despliegues sin penalización.
Pese a su desacuerdo, Brito felicitó a los hinchas de River, destacando que el recibimiento fue “nunca visto en la historia del fútbol, acorde al movimiento popular más grande del mundo”, subrayando que se realizó "en familia, sin incidentes, sin violencia y como siempre alentando a River."
El Monumental verá reducido su aforo en 9.600 personas este sábado debido a la clausura de la Centenario Alta. Además, el club deberá exhibir una bandera para concientizar sobre el uso de pirotecnia no autorizada.
La sanción podría extenderse, ya que la Conmebol también evalúa aplicar multas y restricciones adicionales debido a un acto de racismo cometido por un hincha de River hacia la parcialidad de Atlético Mineiro en la previa del encuentro, situación que podría acarrear nuevas sanciones económicas y limitaciones en el aforo del estadio.